Messner aboga por el alpinismo tradicional y rechaza el "turismo"
Tras el Princesa de Asturias, pronunció una conferencia en Bilbao. "El alpinismo de exploración se ha acabado porque no hay nada más que explorar", apunta el señor de las cumbres, el primero que subió los 14 'ochomiles' sin oxígeno.
No se comporta como un divo el considerado más grande alpinista de todos los tiempos. En la charla 'El encanto de lo imposible', coincidiendo son el 40 aniversario de su pionera ascensión al Everest sin oxígeno, llegó acompañado del escritor y periodista también italiano Sandro Filippini, Firme defensor del alpinismo tradicional, Messner recalcó que "no es lo mismo alpinismo que deporte o turismo" como define a muchas de las actuales expediciones a las cimas del Himalaya. "El alpinista trata de sobrevivir y va donde debe de ir, si es inteligente, y después de tiene que intentar volver sano y salvo. Siempre ha sido así. No es lo mismo el alpinismo tradicional que el alpinismo de la pista. Hacer turismo es legítimo, no es negativo. Pero eso no es alpinismo tradicional", recalcó Messner.
"En primavera la gente va a hacer una pista que ha financiado. Viene el cliente que ha pagado por un producto. No es tan importante el proceso ni cómo lo hace sino lograr el producto que ha comprado, que es la cima. Tiene que a llevarme a esa cima que es lo que comprado", incidió. El montañero añadió que la esencia de la actividad en la montaña como él la entiende "es la suma de peligro, dificultad y altura". "Por ejemplo, el Everest sin oxígeno en invierno es imposible. Ese es el ejemplo de la dificultad que tiene. Y cuando se llega se merece el aplauso del mundo porque ahí no se puede preparar pista", insistió un Messner que añadió que "el alpinismo de exploración se ha acabado" porque "no hay nada más que explorar". "El satélite lo ve todo. Existen muchos estudios por hacer, pero el alpinista va a cambiar lo imposible en posible", dijo También aludió a una modalidad que ha relanzado un deportista catalán. "Lo que hacen los jóvenes es un deporte muy bonito, como Kilian (Jornet). Si está contento así soy el primero en aplaudir, pero a mí no me interesa. En mis libros no existe", apostilló.