Paula Ruiz repite el oro en los 10 kilómetros del Mundial júnior
"Este año ha sido de muchos cambios y estoy muy contenta", comentó la malacitana, que dominó la carrera en Israel de principio a fin. Este curso se ha entrenado con Fred Vergnoux.
"Tenía controlada la situación, estuve muy concentrada. Las dos últimas vueltas apreté y era cuestión de mantener el puesto. Fui en cabeza desde el principio", explicó Ruiz, que salió primera y lideró la prueba desde el comienzo. Nadó como a ella le gusta, en solitario, estirando el grupo las últimas dos vueltas y aumentando el ritmo en el tramo final. Inalcanzable para sus rivales. "Se iba comunicando con nosotros en todo momento en los avituallamientos, y eso en Paula era buena señal", comentó Barreda.
La nadadora ya quedó entre las diez primeras en el Europeo absoluto del mes de agosto en Glasgow, una posición meritoria teniendo en cuenta el camino que le espera para obtener la clasificación olímpica a Tokio 2020. Después de esa competición, Ruiz acudió al CAR de Sierra Nevada a preparar este Mundial júnior. "Entrenó como nunca", dijo Barreda, destacando el "carácter competitivo" de la nadadora que antes se entrenaba en Málaga y que pertenece al CN Mairena.
"Paula estaba a tope, ha nadado genial y tenía confianza. Se le vio fresca, nadaba largo y fácil", añadió Barrera. Paula Ruiz se despide así de la etapa júnior con dos Mundiales seguidos. Una nadadora que, pese a su juventud, afronta la parte absoluta con un gran futuro por delante y cuya ambición le hace no tener techo. "Esta chica tiene algo", comentaba Vergnoux en Glasgow.