Hortelano no consigue batirse ni en 100 ni en 200 metros

Bruno Hortelano generó una expectación tremenda en Getafe en una reunión creada exclusivamente para él. Más de 2.000 personas acudieron a ver el desafío del velocista a sus récords nacionales de 100 y 200, pero esta vez no hubo magia. Hortelano decía estar en forma, pero la cabeza estaba ya sin tensión competitiva y dos carreras sin rivales de entidad no son el ingrediente ideal. Así que se quedó en 10.31 en 100 y en 20.56 en 200. Marcas humanas. Lejos de sus desbordantes 10.06 y 20.04.

Hortelano pudo verse sobrepasado por las excesivas expectativas generadas por su desafío, cuando su estado físico no estaba tan fino como hace tres semanas. "Yo sólo quería seguir disfrutando en la pista, mi propósito no era batir récords. Aunque no tengo ninguna excusa", revelaba Bruno, que inició su temporada en mayo con un 400 en Tenerife, batió los récords de 400 (44.69) y 200 (20.04) y en agosto llegó a los Europeos de Berlín, en los que fue cuarto en 200 y bronce en 4x400. Mucha tralla para seguir a tope. "Ha sido una temporada muy emocional y no quería terminar sin saber de qué era capaz de hacer", contó.

El año de su reaparición milagrosa tras dos años recuperándose de un grave accidente de tráfico tocó así su fin. En una gran fiesta de público, que demostró la capacidad magnética de Hortelano al que ya su cuerpo le dijo basta. Con 10.31 y 20.56 en menos de dos horas y media en las que el público de Getafe acudió por partida doble. "En el intermedio nos hemos ido al bar de enfrente y luego a apoyar", contaba Chema, un espectador que fue con su suegro. Eso fue lo que ganó Hortelano: "He recibido el cariño de cientos de personas que no conozco de nada". Un fenómeno nunca visto en atletismo en torno a una persona.

Hortelano también decidió extender más allá su temporada porque el año que viene hay Mundiales en Doha, en octubre y esto era una forma de prolongar. Allí mira ya. Pronto, los numerosos micrófonos que fueron a Getafe le preguntaron: '¿Bajará de 10 y de 20?' '¿Qué espera del Mundial?'. "Haré mi pretemporada a conciencia, todavía queda mucho", respondió con voz entrecortada. Y así, con una fiesta exclusiva para él, cerró Bruno Hortelano la temporada de su regreso, "la más emotiva", la que, en parte por su historia de superación, le ha convertido en el ídolo del atletismo español... gane o pierda.