El Príncipe heredero de Suecia asiste al triunfo de Bela y Lima
Los número uno refuerzan su liderazgo mundial derrotando en una gran final a Paquito Navarro y Juan Martín Díaz: 6-2, 3-6 y 6-3.
El Príncipe heredero de Suecia, Carlos Felipe, fue uno de los espectadores del primer Open en su país, en la ciudad de Bastad, donde Belasteguín y Lima han ganado su tercer torneo de la temporada, igualan a títulos a Sanyo y Maxi Sánchez, y refuerzan su liderazgo en el ranking mundial. Esta vez sus oponentes fueron Juan Martín Díaz y Paquito Navarro, que jugaron, también sin fortuna, su tercera final de la temporada: 6-2, 3-6 y 6-3 en casi dos horas de partido.
Lo cierto es que ha sidon un gran torneo, en el que Sanyo y Maxi cayeron en los cuartos de final, dando un paso en falso en sus aspiraciones. En las semifinales, Mati Díaz y Ale Galán protagonizaron un gran encuentro ante ante Juan Martín y Paquito, con triunfo de los segundos por 5-7 y 4-6, En la otra semifinal, los Junes, Belluati y Lebrón, se marcaron un choque de igualdad absoluta ante Bela y Lima, con un doble 7-6 para los campeones en un choque en la que todas las parejas ganaron su saque.
En la final, Bela y Lima entraron como un ciclón, y un set perfecto ganaron con comodidad sacando a sus rivales de sitio. Cada boloa tuvo criterio, mientras que Díaz y Navarro estaba desajustados. Sin embargo, esta pareja que sigue en ascenso, cambió de manera radical en el segundo, y la pegada de Navarro al lado de la genialidad de Díaz variaron este choque. Sin embargo, en el tercero, en el segundo juego Bela y Lima rompieron el saque y eso les dio alas para firmar una gran victoria en un enorme partido en el Juan Martín Díaz ya empieza a ser el jugador de hace más de un año, que empieza a soltar su brazo y sacar las bolas por tres, aunque aún a cuentagotas.
La polémica del torneo, tanto en las semifinales como en la final, vino protagonizada por las quejas de Juanito Lebrón y Paquito Navarro a los saques de Bela y Lima, pidiendo al árbitro (sin consideración) que tuviese en cuenta la ilegalidad del golpeo: los dos andaluces, en sus partidos, perdieron la concentración por momentos con este acción.