JUEGOS MEDITERRÁNEOS | ESPAÑA 4-ARGELIA 1
La Selección Sub-18 exhibe su talento ante la débil Argelia
Un doblete de Abel Ruiz y Sergio Gómez a los 20 minutos sentencia el debut del equipo español en los Juegos Mediterráneos en el Municipal Juan Ríos Calafell.
A los 20 minutos de partido, la Selección española Sub-18 ya ganaba por 4-0 a Argelia. Un vendaval el equipo de Luis de la Fuente, que supo conectar con precisión con sus atacantes y destrozar a los africanos, liquidó un debut plácido, en el que los españoles pudieron hasta descansar en un segundo tiempo de dominio inocuo argelino. El próximo partido es el domingo ante Bosnia-Herzegovina, por lo que administrar bien los esfuerzos será clave para no reducir el potencial que tienen los jóvenes españoles.
Poco importó el retraso en el comienzo del partido (de media hora) debido a unos problemas con el autocar. O que la megafonía fallase y no se pudieran escuchar los himnos nacionales en el Municipal Juan Ríos de Calafell. En apenas seis minutos, Abel Ruiz ya transformó en gol una buena asistencia de Roberto. Era el segundo aviso, pues instantes antes el propio Roberto había errado un mano a mano. Ya se vio que ambos equipos iban a dos velocidades.
España estuvo excelentemente posicionada y los cambios de orientación de sus centrales encontraron situaciones propicias para que Sergio Gómez o un habilidoso José Alonso, del Sevilla, desequilibraran. Así fueron cayendo los goles en una tarde sofocante. Gómez, con la zurda, marcó el 0-2 en el minuto 11, mientras que de nuevo Abel Ruiz, el delantero del Barcelona, superó a Maachow después de un pase de Lara. En el minuto 20, Gómez, ahora en el Borussia Dortmund, culminó la goleada exprés. Ambos son letales cuando tienen un segundo para armar la pierna.
Argelia contemplaba atónita el tormento y con 70 minutos por delante que podían suponer un calvario. El nivel de los españoles fue excelso, pero redujeron varias marchas tras ese 4-0. Los africanos empezaron a controlar la posesión, sin hincarle el diente a España, pero sí reduciendo su ataque. Más profunda, Boutrif marcó el 4-1 en el 75’, el gol del honor muy celebrado en las gradas de Calafell, que no se llenaron pero que mostraron una muy buena entrada. El sueño del oro de los españoles arrancó de manera autoritaria.