Dez Bryant, DeMarco Murray y otros agentes libres del montón

La semana pasada concluyó el plazo que la NFL tiene para calcular lo que los equipos gastan y pagan en la agencia libre, balance éste que es la base que se usa para, después, otorgar las elecciones compensatorias en el próximo draft. Es por eso que muchos veteranos no han recibido ofertas en los últimos tiempos y, según se vaya acercando julio y el principio de los campos de entrenamiento, esta situación tiende a cambiar.

Es el caso del más renombrado agente libre disponible, que no es otro que Dez Bryant. El receptor de los Dallas Cowboys, de 29 años de edad, rechazó una oferta multianual de los Baltimore Ravens porque busca un contrato de un sólo año para ser agente libre puro el próximo marzo, algo que no ha podido ser esta temporada al ser cortado por los Dallas Cowboys cuando los grandes fastos del mercado ya habían pasado. Ayer mismo se especulaba con que los Green Bay Packers serían un destino ideal para él (¿no lo es para todos los receptores?) y lo lógico es pensar que no le faltarán ofertas.

Hay más wide receivers veteranos en su situación. Brandon Marhsall, por ejemplo. O Eric Decker. Aunque, quizás, el nombre más goloso de este segundo mercado de veteranos sea el de Jeremy Maclin, porque aún tiene 30 años, menos que los nombrados, y eso siempre es un plus.

En el grupo de corredores libres hay nombres de postín. DeMarco Murray, 30 años, está libre. También Eddie Lacy (27), aunque sus últimas temporadas han sido tan malas, y ha tenido tantos problemas con su sobrepeso, que parece difícil que tenga sitio en la liga. Adrian Peterson (33) es probable que esté ante su última oportunidad, si es que llega. Jamaal Charles (31) tendrá que competir con gente más joven como Terrance West (27) u Orleans Darkwa (26), que también buscan equipo.

Hay tres tight ends que destacan sobre el resto de los que están en el paro: Julius Thomas (29), Coby Fleener (29) y Martellus Bennett (31). Todos ellos han tenido momentos estelares en la liga.

La crisis de hombres de línea ofensiva en la NFL se nota en que dos jugadores que fueron grandes elecciones de primera ronda se encuentran ahora mismo sin trabajo. Son Luke Joeckel (26) y Greg Robinson (25). Junto a ellos, veteranos como Jahri Evans (34) o Zane Beadles (31).

En defensa la unidad, con mucho, más castigada de este mercado ha sido la de safety. Al punto de que se han convertido en los running backs de la defensa: los menos pagados, los más fáciles de cortar y sustituir. Así, lo están pagando Eric Reid (26), que ha demandado a la NFL por confabulación para no contratarle debido a sus protestas ante el himno y la bandera, Tyvon Brach (31), Tre Boston (25), Mike Mitchell (30) o T.J. Ward (31).

Entre los cornerbacks hay grandes nombres del pasado: Darrelle Revis (32), Sean Smith (30) o Pacman Jones (34), junto a otros más jóvenes y que extrañan más en esta posición como Jeremy Lane (27), Alterraun Verner (29) o Bashaud Breeland (26), que deberían estar en plantillas de 53 en agosto. El último caso, el de Breeland, es especial porque firmó con los Panthers pero no pasó la prueba física por una infección en un pie; si se recupera, será una golosina de estos últimos estertores del mercado.

En el puesto de linebackers también abundan los grandes nombres que lo van a tener en chino para volver a competir, porque la edad y/o las lesiones no perdonan. Brian Cushing (31), Tamba Hali (34), Lawrence Timmons (32), NaVorro Bowman (29), Koa Misi (31)...

Por último, en la línea defensiva nos encontramos con algunos nombres que aún podrían dar cierto rendimiento en la NFL. Son los casos de, sobre todo, Jonathan Hankins (26) y Jared Crick (28), aunque éste último viene de una lesión de espalda y hay dudas sobre su estado físico. Es en esta unidad donde las lesiones han hecho que muchos jugadores de nivel estén disponibles porque se teme por el futuro de sus carreras; entre ellos destacan Cliff Avril (32), Nick Fairley (30) y Sharrif Floyd (25). Lo probable es que ninguno de ellos pueda seguir jugando en la NFL.