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El Cangas recibe al Puerto de Sagunto en un duelo a 'muerte'

Los dos equipos luchan por evitar el descenso, y sólo uno podría evitarlo. A tres jornadas del final de temporada es el choque del año

Madrid
El Cangas recibe al Puerto de Sagunto en un duelo a 'muerte'

Un partido, por importante que sea, no es a vida o muerte. Bueno, este sí, a muerte para los dos, porque hay veces que el descenso condena a los clubes para siempre. El Cangas y el Puerto de Sagunto lo saben, lo conocen, y desde hace tiempo esperan este encuentro: el Cangas es antepenúltimo (15 puntos), y el Puerto de Sagunto penúltimo (13). Y queda el Zamora, último (12) puntos, con un calendario imposible: no juega este sábado porque recibe en su pista al Granollers, que pugna por la segunda plaza y por la Final Four de la EHF.

Virtualmente, y lo saben ambos, el Cangas-Puerto de Sagunto (17.00; Movistar +) de este sábado es definitivo para el Cangas: si gana por más de 5 goles, se salvaría; si pierde, quedarían cuatro puntos en juego con los dos igualados a puntos, pero sería el Puerto de Sagunto el equipo en ventaja.

Los dos conjuntos llevan unas trayectorias semejantes, con unas plantillas veteranas, y con dos porteros de edad que es en lo que fundamentan su éxito: Bruixolá (40) por el Puerto, y Moyano (47) por los cangueses. Los dos equipos han cambiado de entrenador, porque Magi Serra reemplazó en enero a Víctor Gracía Pillo (una institución gallega), y Sergio Berrios (exjugador del club) a Nikola Milos.

El Cangas, desde que sus jugadores decidieron que iban a luchar por evitar el descenso, pero no era lo peor que les podía pasar, se han quitado presión, y llevan ya nueve puntos en la segunda vuelta, con las victorias en las pistas del Guadalajara y Teucro, y las remontadas ante el Zamora (para ganar por un gol) y el empate ante el Anaitasuna (sumo un punto, que pudieron ser dos, aunque también ninguno en un minuto loco). Por eso ha convocado a toda la afición de la zona, porque es el partido del siglo para el club, aunque el año pasado se salvó en la última jornada remontando lo que parecía imposible.