Jessie Magdaleno pone su cetro en juego 371 días después
El púgil de Las Vegas se enfrenta este sábado al campeón WBO interino del supergallo: Isaac Dogboe para unificar el título. Ambos ponen en liza también su invicto.
Duelo de invictos en Philadelphia para unificar el peso supergallo en la Organización Mundial de Boxeo (WBO, en inglés). Ese es uno de los menús que el boxeo tiene para sus aficionados este fin de semana, sin duda uno de los más apetecibles. Jessie Magdaleno (25-0, 18 KO) e Isaac Dogboe (18-0, 12 KO) se jugarán ese título. Ha pasado más de un año (371 días) desde que el púgil de Las Vegas se subió al ring por última vez, mientras que Dogboe vive su presentación en el boxeo mundial. Muchos factores a los que se le suma la inquina personal, que la hay.
En la previa, el padre y entrenador del ghanés arremetió contra Magdaleno llegando incluso a los insultos racistas (nació en Las Vegas, pero es de sangre mexicana). "Esperamos que Magdaleno no corra como una gallinas, que entre sin excusas porque estamos listos para él. Para comerlo, para arrojarlo sobre el muro de México y presentarle el título a Donald Trump", espetó Paul Dogboe. Pidió disculpas días más tarde, pero la semilla ya estaba plantada, aun así, Magdaleno no ha querido entrar al trapo. "Se trata de quien tiene la experiencia de mantener la concentración y de hacer nuestro trabajo", concluyó el estadounidense.
Sin duda esas palabras están en su cabeza, y querrá venganza. "Los puños hablará", también ha asegurado. Magdaleno llega precisamente de demostrar su pegada. Ganó el título en una decisión muy discutida ante Donaire, y en su primera defensa noqueó a Adeilson Dos Santos en sólo dos asaltos. El de Las Vegas tiene buena movilidad y contundencia, Dogboe también. La altura puede ser la clave. Ambos tienen la misma envergadura, pero Magdaleno es más alto, las trayectorias serán diferentes. Dogboe está ante la mayor prueba de su carrera y debe demostrar que su camino a esta pelea no ha sido casualidad. Magdaleno ha demostrado su calidad y es favorito, pero le puede pesar el óxido de ring. Dos invictos y un título en juego en Philadelphia.