Jim Mora, al fin, defiende a Josh Rosen

Hace un mes, Jim Mora se convirtió en noticia porque dijo que los Cleveland Browns deberían escoger a Sam Darnold con el número uno del draft. No parece una opinión especialmente controvertida o polémica ¿verdad? A fin de cuentas, Darnold es el máximo favorito para ser el primer elegido por la franquicia de Ohio el próximo jueves.

Lo llamativo del asunto es que Mora ha sido el entrenador de UCLA durante toda la carrera de Josh Rosen, que compite con Darnold por ser el primer quarterback elegido en el draft. Es más, ambos fueron rivales, pues Darnold lanzó para USC, y ambas universidades residen en Los Angeles y comparten conferencia, la Pac-12, así que todos los años de sus carreras en los que han sido titulares hemos tenido un Darnold vs. Rosen, con Jim Mora en la banda.

Aunque el entrenador, que ahora mismo está en el paro, quiso precisar al día siguiente que se refería a que veía a Darnold encajando mejor en la cultura tanto de los Browns como de la propio ciudad de Cleveland, la realidad es que los ex entrenadores no dicen nunca ese tipo de cosas de sus jugadores, porque dan una imagen penosa, y eso no les ayuda en su trabajo a futuro.

Además, y aunque se especuló con la tontería de que Mora trataba de ayudar a Rosen a ir a los New York Giants en vez de a los Cleveland Browns (si el jugador quisiera eso lo haría público o diría a sus agentes que lo movieran en privado, no iba a prestarse Mora a tal despropósito subliminal), el propio Rosen se sintió ofendido y puso un tuit que simplemente se preguntaba "¿Por qué?"

El caso es que Jim Mora ha debido darse cuenta de la imagen de deslealtad que dejó en el aire. Y, quizás esto es mucho decir, pero puede que haya sido en parte culpable de que la percepción sobre Josh Rosen haya caído un poco en los últimos tiempos. Una cosa es que se hable de dudas sobre su compromiso con el football y otra muy diferente que su propio entrenador cause controversia sobre su figura. El resto de la NFL no pasa por alto esto último.

Es por eso que, en sendos mensajes de twitter, Jom Mora ha explicado que "todos los que duden de la competitividad y el amor por el juego de Josh Rosen no pueden estar más equivocados. Él es la gran verdad, será muy grande y ganará campeonatos" antes de añadir que "he tenido la fortuna de trabajar con 24 personas que están en el Hall of Fame y creo que podriamos ver a Josh Rosen entre ellos. Mucho trabajo por hacer, pero tiene todas las cualidades para ello. ¡Buena suerte, amigo!".

Es probable que estas palabras lleguen tarde. El entrenador ha quedado, en todo este episodio, en una situación comprometida, porque no apoyar sin reservas a sus chicos no parece de recibo en una profesión que vive tanto de la lealtad como la de entrenador de fútbol americano universitario. Y el daño que le haya podido hacer al jugador, si es que ha existido, no va a quedar subsanado con estas palabras.

No obstante, y a cuatro días de que se celebre el draft, Josh Rosen puede usar cualquier argumento a su favor para hacer ver a los equipos de la NFL que es falso que sea un QB complicado de gestionar por su inquietud intelectual y por su falta de compromiso con el football. Y éste puede ser tan bueno como cualquiera que se ha usado en su contra, probablemente sin fundamento.