Dallas espera batir el récord de asistentes al draft de la NFL
Los organizadores del acontecimiento cuentan con que 270.000 pasen por los tres días de festividades, superando lo de Philadelphia 2017.
El draft de la NFL no ha parado de crecer en seguimiento en los últimos tiempos. De lo que era el proceso de selección de rookies en los años 80 a lo que era a principios de siglo XXI va un mundo. Pues lo que va del inicio de los 2000s a la actualidad va un universo entero. La explosión ha sido tan despanpanante que asuntos como la Combine han pasado a ser espectáculos televisivos con producciones dignas de cualquier partido mundial de cualquier deporte, los expertos que se dedican única y exclusivamente al draft son legión, las webs de análisis y predicciones se cuentan por miles, y el dinero llega a espuertas a la liga.
Es por eso que sorprendió, en un principio, que la liga se mostrará tan lenta a la hora de explotar el acontecimiento con todas sus consecuencias. El hecho de que siempre se celebrase en un recinto como el Radio Music City Hall de Nueva York era una rémora del pasado, de cuando ésto lo seguían cuatro locos y los profesionales de la competición, y nadie más.
Así que a nadie cogió por sorpresa que en 2015 decidieran irse a Chicago, por probar. Y, de ahí en adelante, tras la respuesta masiva de los aficionados, quedó claro que el draft pasaba a convertirse en un evento rotatorio con espíritu de circo ambulante para los seguidores más fanáticos de la NFL. Y como de éso esta liga tiene para aburrir, el resultado es que las cifras empiezan a ser brutales.
2015 en Chicago, 2016 también en Chicago, 2017 en Philadelphia y, ahora, 2018 en Dallas, han visto como, en cada ocasión, el récord de asistentes al draft iba cayendo con contundencia. No olvidemos que iban ni 3.000 personas a ver ésto en Nueva York. El año pasado en Philadelphia hubo 250.000 espectadores presenciales en los tres días de draft. Y Dallas espera llegar a 270.000 este año.
De entrada, el sorteo de entradas gratis para la fiesta que se montará en el exterior del estadio de los Cowboys ya ha sobrepasado todas las previsiones. Son 108.000 tickets los que se sortearán y las peticiones exceden esa cantidad por mucho. Por supuesto, no el mismo ir el jueves, en la primera ronda, que pasarse por allí el sábado, para las rondas entre la cuarta y la séptima. El jueves habrá lleno absoluto.
Dentro del estadio, la NFL tiene que montar toda la infraestructura para el show televisivo y para acoger a los 32 equipos, con sus respectivas "war rooms", gigantescos despachos de trabajo, amén de a los jugadores y sus familias. Después de todo ese entramado, le han quedado 25.000 entradas para los aficionados.
Y lo que van a hacer es venderlas de manera equitativa entre todas las aficiones para que haya 32 huecos diferenciados para ellas, de manera que puedan actuar en conjunto aplaudiendo a sus elegidos y, en el caso de los Jets, silbando a los suyos, que hay tradiciones que no se deben perder.
El espectáculo, por lo tanto, estará también en las gradas y en las afueras del estadio, con un verdadero parque temático de celebración de la NFL. El draft ha pasado de ser un proceso de ejecutivos y entrenadores para convertirse en un punto más de máximo interés de la liga, y lo están llevando a su máxima exposición.
En Dallas habrá récord de espectadores. Apuesto a que también habrá récord de audiencia televisiva, duplicando los playoffs de la NBA y más aún a los de la NHL, que se disputan al mismo tiempo, dejando a una distancia sideral a la jornada de la MLB en este aspecto. Y la bola no parará de crecer. Para 2019 y 2020 las ciudades que aspiran a acoger el acontecimiento son Las Vegas, Denver, Kansas City, Tennessee y Cleveland (Canton). Todas ellas quieren un pedazo de la abundancia que siempre reporta la NFL, incluso en un espectáculo de un señor en corbata diciendo nombres de chavales y equipos.