Kawauchi, el 'popular' que lleva 81 maratones, gana en Boston
El mediático japonés, que ha corrido 81 maratones y afrontaba la cuarta del año, venció en la mítica prueba. Desi Linden, en mujeres, dio la victoria a EE UU 33 años después.San Silvestre 2018 en Madrid: recorrido y cortes de tráfico
La Maratón de Boston vivió el día más complicado a nivel meteorológico de sus 122 ediciones. Con lluvia, viento en contra, atletas con chubasquero... Y allí emergió el fondista más duro de la historia: Yuki Kawauchi. El fenómeno paranormal nipón, el atleta que ha corrido 81 maratones, logró su victoria más prestigiosa en Massachussets. Japón volvía a triunfar en la cita 31 años después, cuando lo hiciera Toshihiko Seko en 1987.
Como superviviente a los kilómetros que es, aguantó el tempo lento (1h 05:59 la media) y, siendo uno de los únicos que corrió en tirantes y sin ropa impermeable, estuvo en cabeza hasta que Geoffrey Kirui lanzó un ataque demoledor que dejó a todos los favoritos: Rupp, Desisa, Lemu... Parecía decisivo, pero Kawauchi aguantó el tipo, tirando del carro perseguidor del que se fueron borrando los otros aspirantes. Y Kirui, ganador en 2017 y campeón mundial, desfalleció por sopresa. Kawauchi era ganador de la Maratón de Boston con 2h 15:58. ¡Era su cuarta maraton del año! Tremendo. "¿Ha sido un día duro, no?", le preguntaban. Kawauchi respondió: "Las condiciones han sido las mejores posibles para mí".
El tiempo es el más lento desde 1973, cuando Jon Anderson hiciera 2h 16:03, pero es que este lunes en Boston no se trataba de ir rápido, sino de ser el más duro. Y ahí Kawauchi no tiene rival, El nipón, conocido como Citizen Runner, es un funcionario que trabaja cuarenta horas semanales y es el gran icono del amateurismo. Ha protagonizado escenas peculiares como correr una media maratón en traje (en 1h 06) y en 2017, por ejemplo, corrió hasta 12 maratones (los grandes especialistas corren una o dos). De las 81 que ha corrido en 79 ha bajado de 2h 20 (2h 08:14 es su marca personal). Es algo nunca visto para un atleta que ya era único y en Boston, donde entró a meta llorando, se ha elevado a leyenda.
Desi Linden, victoria femenina de Estados Unidos 33 años después
Si un japonés batió a los africanos, el fondo mundial femenino vive un profundo tiempo de cambio. El dominio africano está siendo desafiado por Estados Unidos. Lo reflejó Emma Coburn al ganar los obstáculos mundialistas en Londres, lo continuó Shalane Flanagan ganando en Nueva York en 2017 y lo ha rubricado Desi Linden, una estadounidense de 34 años y de origen latino, que ganó la Maratón de Boston para su país, algo que no sucedía desde 1985, cuando lo hiciera Lisa Larsen Weidenbach. La victoria había sido africana desde 2007, cuando venció Grigoryeva.
La victoria de Linden, antes de casarse Davila y licenciada en Psicología en Arizona State (como Jon Rahm), tuvo mucho de épico. Desi y el resto de atletas tuvieron que hacer frente a un vendaval en contra y a la fuerte lluvia que asoló a Massachussets. Eso provocó una escena inédita, los atletas competían con chubasquero. Linden iba con el suyo negro y amarillo y fue la que mejor resistió a las terribles condiciones mientras que las favoritas africanas (Daska, Kiplagat...), caladas enteras, iban sucumbiendo inevitablemente al frío y al agua. Linden fue la única que aguantó para llegar a la meta en 2h 39:54, una marca muy pobre, al igual que la de Kawauchi, que atestigua la carrera de supervivencia que se vivió en Boston. Es el peor crono desde 1978 (2h 44:52), pero también fue en el día más difícil, en el que triunfaron una estadounidense y el fenómeno Kawauchi.