Los Patriots deben preocuparse por los Jacksonville Jaguars

La frase “quien no conoce su historia está condenado a repetirla” se le ha atribuido a varios personajes a través de la historia. Quien sea que lo haya dicho, no expresó más que la verdad y los New England Patriots deberían tenerla presente de cara a su juego del próximo domingo ante los Jacksonville Jaguars.

Los Patriots se han establecido como la dinastía más dominante de la era del Super Bowl durante los 18 años de carrera de Tom Brady, en los cuales han ganado cinco títulos, han jugado siete Super Bowls y la del domingo será su aparición 12 en la Final de la AFC. Su marca de 18-3 en casa durante la postemporada parece decirlo todo.

Los 18 triunfos nos dicen que Brady y los Patriots son simplemente dominantes en Foxborough cuando es cuestión de ganar para sobrevivir. Las tres derrotas, sin embargo, son una luz de esperanza para Jacksonville. Una luz muy brillante.

En una liga en donde el quarterback es el rey del tablero, un duelo entre Brady y Blake Bortles podría parecer un abuso. Sin embargo, esa es solo una de muchas coincidencias que tienen los Jaguars con respecto a los otros tres equipos que han ido a Gillette y han salido avantes.

Nadie puede disputar que Blake Bortles esté muy por encima del nivel de Mark Sanchez o Joe Flacco. Pero para despejar cualquier duda, ahí están los números.

Flacco en 2009: 3,613 yardas, 21 TDs, 12 INT, 88.9 de rating.

Sanchez en 2010: 3,291 yardas, 17 TDs, 13 INT, 75.3 de rating.

Flacco en 2012: 3,817 yardas, 22 TDS, 10 INT, 87.7 de rating.

Bortles en 2017: 3,667 yardas, 21 TDs, 13 INT, 84.7 de rating.

Y eso no es todo. Hay mucho más.

Salvo los Jets de 2010 (11-5) que fueron a Foxborough a derrotar 28-21 a los Patriots, las otras dos derrotas de New England en casa durante los playoffs son ante equipos de no más de 10 triunfos, Baltimore (9-7) en 2009 y nuevamente los Ravens en 2012 (10-6). ¿La marca de los Jaguars este año? Sí, 10-6.

Jacksonville también comparte con los verdugos previos de los Patriots el hecho de que dos de los tres equipos que han ganado en Gillette contaban con una de las seis mejores defensivas de la NFL. La de los Jaguars fue la segunda mejor durante la campaña regular.

Además, Jacksonville al igual que Ravens y Jets tienen una ofensiva se enfoca en correr primero y pasar después. En 2009, Baltimore tuvo la quinta mejor ofensiva terrestre de la NFL, en 2010 los Jets fueron cuartos y dos años después Baltimore fue el 11mo mejor ataque terrestre. Jaguars gozó del mejor ataque por tierra en 2017.

Si puedes mantener a Brady fuera del terreno tienes la mitad de la batalla ganada. La otra mitad se gana con intercambios de balón. Y ahí también hay mucho que comparar. En la derrota de la ronda de comodines 33-14 ante Baltimore en 2009, los Ravens ganaron la pelea de intercambios 4-2. Al siguiente año, los Jets dominaron ese renglón 1-0. Y dos años después Baltimore robó tres balones, dos de ellos intercepciones, y no regaló ninguno para avanzar al Super Bowl 28-13.

Esta temporada los Jaguars tuvieron un margen de intercambios de +10 y fueron la segunda defensiva con más robos con 33, sin contar los cuatro que han provocado esta postemporada. De hecho, durante la temporada regular se enfrentaron a tres quarterbacks campeones de Super Bowl: Flacco, Ben Roethlisberger y Russell Wilson, y los limitaron a 3 touchdowns a cambio de 10 intercepciones.

Por su parte, Brady acumula 5 touchdowns y 6 intercepciones en sus tres derrotas previas en casa en playoffs, en las que nunca ha superado los 90 puntos de rating y ha sido capturado 8 veces. Por cierto, Jacksonville tuvo la mejor defensiva contra el pase y acumuló 55 sacks, mientras que los Patriots llegan al duelo igual que en sus tres derrotas anteriores, con una de las seis ofensivas más anotadoras de la liga.