¿En quién están pensando los Arizona Cardinals?

En medio del carrusel de entrenadores, como en el juego de las sillas musicales, se nos han quedado los Arizona Cardinals sin saber muy bien qué hacer ni a dónde mirar. Si exceptuamos a los Tennessee Titans, cuyo puesto de jefe quedó libre ayer con el despido de Mike Mularkey, el resto de franquicias que empezaban el proceso de reinventarse hace unas semanas ya han concluido con su búsqueda.

Los Oakland Raiders han fichado, por 100 millones de dólares y diez años, que ya hay que tener fe, a Jon Gruden. Los Chicago Bears no esperaron a nadie ni dieron la más mínima opción de pensárselo a su elegido, Matt Nagy, y lo firmaron en cuanto los Kansas City Chiefs quedaron eliminados.

Los Indianapolis Colts querían a Josh McDaniels y anduvieron jugueteando con otros candidatos hasta que los Titans se quitaron de encima a Mularkey, momento en el que parece que apalabraron al coordinador ofensivo de los Patriots. Los Detroit Lions le han hecho el cortejo a toda cancha a Matt Patricia, y éste les podría haber dado el sí, lo que hizo que los New York Giants se quedaran con su segunda opción (querían a Patricia), Pat Shurmur.

Éste último párrafo, conviene subrayarlo siempre, tiene la categoría de rumor porque ninguno de los implicados puede firmar su contrato mientras sigan vivos en la competición. Y lo siguen. Así que todo puede caerse, las partes volverse atrás, en cualquier momento. Por lo tanto, ni está cerrado ni quiero que lo entendáis así.

Ahora bien: es todo muy fiable. Y filtrado con arte y salero por los diferentes equipos y agentes. Lo más normal es que se concrete. Y, entonces, la pregunta clave final es: ¿en quién están pensando los Arizona Cardinals?

Su sueño era Pat Shurmur pero, claro, entre los Cardinals y los Giants aún hay unos escalones de prestigio, ciudad y situación como para que el coordinador ofensivo de los Minnesota Vikings prefiera irse a la Gran Manzana antes que al desierto.

En Arizona han de recurrir a su plan B.

Los Cardinals han entrevistado, de momento, a Steve Wilks, coordinador defensivo de los Carolina Panthers, a Mike Munchak, entrenador de la OL de los Pittsburgh Steelers, y a su propio coordinador defensivo, James Bettcher. Es probable que todos ellos vayan a una segunda ronda de entrevistas, y también es probable que se tenga dudas con cada uno de los tres, porque sino alguno ya estaría firmado.

El caso de Wilks es extraño. Comenzó este carrusel de entrenadores siendo uno de los favoritos para casi todos los puestos, y se le están acabando las opciones; se dice que es un tipo de fuertes principios y actitudes y, quizás, eso no le haya hecho bien en las entrevistas. Lo de Bettcher también parece que es más fachada que realidad, porque si les interesara ya le habrían cerrado; a fin de cuentas es de la casa, Bruce Arians está abogando por él sin disimulo, y no les habría costado nada presentarlo hace ya un par de semanas si es que le tenían verdaderamente en mente.

En cuanto a oscuros candidatos que ahora mismo no han emergido, hay dos nombres que llaman la atención.

El primero es Brian Flores, actual entrenador de linebackers en los New England Patriots. Dicen por Fóxboro que es el favorito de Belichick para ocupar el puesto de Patricia como coordinador defensivo. El segundo es John DeFilippo, entrenador de quarterbacks de los Philadelphia Eagles, un tipo que no para de crecer en prestigio interno en la NFL.

Pero ¿saltar de no ser ni coordinador jefe a ser entrenador principal? Resulta algo arriesgado y poco ajustado a lo que son los Arizona Cardinals. Hay informaciones que vinculan a DeFilippo con Wilks, al punto de que podría ser su coordinador ofensivo en la misma oferta de trabajo.

En cualquiera de los casos, lo cierto es que los Cardinals se enfrentan a un final del carrusel de entrenadores en el que parecen ser los "perdedores" y en el que se tienen que quedar con los "restos" y, encima, ahora tienen que lidiar también con la competencia de los Titans.