Los Patriots son tan favoritos que ni se pagan las apuestas

El favoritismo de los New England Patriots de cara a la Super Bowl LII es apabullante. Lo ha sido desde septiembre, cuando comenzó la temporada, y eso no ha cambiado en los playoffs. Es lo que tiene ser los actuales campeones, tener al mejor entrenador y al mejor jugador de la historia, claro.

Sin embargo, y tras la ronda divisional, el hecho es que este favoritismo se ha disparado hasta el máximo nivel posible. Y no es una hipérbole: ahora mismo no se paga ni un céntimo en la mayoría de casas de apuestas de Las Vegas, ni en el resto del mundo, por el triunfo de los Patriots.

No es de extrañar. El fabuloso fin de semana pasado nos ha dejado una "final four" en la que el pedigrí de los Patriots se opone a los de los Minnesota Vikings, los Philadelphia Eagles y los Jacksonville Jaguars. Y resulta que entre los tres han ganado exactamente cero Super Bowls. Es más, los Jaguars ni siquiera han estado en alguna a lo largo de su historia.

Además, los tres equipos están dirigidos por quarterbacks que causan serias dudas en la mayoría de los aficionados, y este tema es crucial para valorar las apuestas, pues estas no indican más que la opinión mayoritaria de los apostantes.

Ni Blake Bortles, ni Case Keenum, ni Nick Foles permiten soñar con imposibles acciones ofensivas que decanten los partidos de los equipos a su favor. Eso no sólo no ha impedido que estén aún en la pelea por el título, sino que en muchos casos ha sido hasta clave por no querer arriesgar más de la cuenta. No obstante, en la visión general eso les pone un escalón por debajo de los Patriots.

El siguiente favorito en las apuestas son los Minnesota Vikings. Se paga, de media, 2,2 dólares por dolar apostado en su favor. Jugarían en su estadio en la Super Bowl LII, no lo olvidemos; eso puede ser un pequeño factor a la hora de considerarles por delante en la carrera.

Tanto los Eagles como los Jaguars generan poca fe entre los que se juegan el dinero en estas cosas. Se paga a 6,5 dólares por dolar apostado que levanten el Lombardi Trophy.

En los partidos de este fin de semana, los New England Patriots parten con nueve puntos de ventaja sobre los Jacksonville Jaguars, que es una auténtica barbaridad para una final de conferencia. Los Minnesota Vikings tienen 3,5 puntos de ventaja sobre los Philadelphia Eagles.

No sería la primera vez, desde luego, que las apuestas fallan. y a lo grande. No obstante, si lo hicieran en esta ocasión sería una de las mayores, porque es difícil encontrar en las finales de conferencia una favorito tal que ni siquiera te paguen un céntimo por apostar en él. Esos son los New England Patriots, esa su dinastía y esa su dictadura.