A las nuevas Guerreras les avalan sus notables historiales
Cuatro son campeonas del Mundo, otras juegan en el extranjero, y la más joven hace dos años fue elegida la mejor de Europa en su puesto.
Aunque la historia dice que las Guerreras nunca han podido con Noruega en los grandes acontecimientos (tres victorias en 22 encuentros), la realidad es que en la Selección actual, remozada, con seis jugadoras debutantes, ocho no tienen referencias de las nórdicas: Mireya González, Amaia González y las nuevas. Silvia Arderíus, Almudena Rodríguez, Maitane Etxeberria, Jennifer Gutiérrez, Paula García e Ivet Musons nunca se han enfrentado a las campeonas de todo.
Que sean debutantes no significa que estén exentas de calidad y de experiencia. Por ejemplo, Ivet Musons (24 años) y Jennifer Gutiérrez (22) son campeonas del mundo del balonmano playa: Ivet fue un fichaje de los seleccionadores, pero Jennifer, nacida en Suiza de madre alemana, jugaba desde siempre en la playa en Algeciras. Y otras dos campeona son Silvia Arderíus (27 años, la más veteranas de las nuevas), y Paula García, oro mundial universitario.
Es decir, las debutantes lo son, pero aterrizan avaladas por experiencia y trabajo en sus clubes. Incluso la más joven de las Guerreras, Maitane Etxeberria, con sólo 20 años, la zurda que da descansos a Carmen Martín en el extremo, hace dos fue elegida la mejor en su puesto en el Campeonato de Europa júnior.
Apuesta. Todo eso explica que no acusen la presión, que salten a la pista con desparpajo, e incluso que tengan reacciones de veterana para robar faltas en ataque de rivales de renombre en el concierto internacional. Y eso avala también la apuesta de la Selección por Seynabou Mbengue, con sólo 19 años y en el grupo de las Guerreras por si surge alguna contrariedad que obligue a realizar un cambio.