Astros ganan en un partido maravilloso a NY y se ponen 2-0
Carlos Correa impulsa la carrera anotada por José Altuve en la parte baja de la novena tras una actuación extraordinaria de Justin Verlander.
Aunque ya lo hemos mencionado con anterioridad, merece la pena volver a repetirlo. Cuando los Astros vieron cómo se cerraba el mercado de traspasos el 31 de julio, varios de los pesos pesados del vestuario manifestaron con desagrado la falta de refuerzos para un proyecto tan ilusionante como el que más. La gerencia corrigió el rumbo y consiguieron hacerse con Justin Verlander cuando faltaban minutos para finalizar el mercado de waivers el 31 de agosto.
Los Houston Astros realizaron esa maniobra para citas como esta.
Un imperial Justin Verlander brilló en su estreno en las Series de Campeonato ante los New York Yankees, siendo capaz de ir uno o dos pasos más allá que lo hizo Dallas Keuchel 24 horas antes, puesto que completó las nueve entradas y los texanos se hicieron con el triunfo por 2-1 en una emocionantísima parte baja de la novena en la que José Altuve anota tras el hit de Carlos Correa.
¿Acaso se puede pedir algo más?
Un gran duelo desde el montículo
Al igual que ocurrió en el primer encuentro, ambos equipos presentaban sus mejores credenciales con Verlander para los locales y Luis Severino para los Bombarderos del Bronx, y gracias a sus fabulosos arsenales en la loma, se pudo comprobar desde el primer momento que este partido se iba a decidir por los pequeños detalles.
Como la gran defensa de los Astros que evitaba los mayores problemas para Justin en una tercera entrada en la que Josh Reddick evitaba un home run o al menos bases extra sobre un Chase Headley que sigue buscando su primer hit en todos los playoffs, e incluso la fulgurante combinación entre el propio Reddick, Carlos Correa y Alex Bregman antes de evitar un eventual triple de Brett Gardner gracias a una revisión de vídeo que vuelve a reafirmarse como un elemento fundamental para el deporte en el S.XXI o en lo que al béisbol se refiere.
En una lucha de poder a poder, estaba claro que el duelo Verlander-Severino se podía desequilibrar por una acción concreta… y así fue.
El momento Jeffrey Maier
Porque nada más iniciarse la cuarta entrada en turno para los locales, Carlos Correa mandaba una pelota al lado contrario que se marchaba ‘in extremis’ a la grada ante el intento de Aaron Judge… y una potencial interferencia de un joven aficionado de Houston.
Sin embargo, ese momento Jeffrey Maier en honor del joven aficionado de 13 años que ‘ayudó’ a un home run de Derek Jeter en los playoffs de 1996 con la inestimable colaboración del árbitro del right field no iba a tener su versión 2.0 porque el seguidor jamás influyó en una bola que superaba por poco la línea amarilla, pero que lo hacía.
Con Verlander batallando como un jabato y en una de sus versiones más dominantes en cualquier época del año, los Yankees consiguieron ‘cazarle’ tras un par de dobles consecutivos de Aaron Hicks y Todd Frazier, siendo el segundo de lo más curioso puesto que la pelota se quedó trabada en la valla del sector izquierdo… y ahí quedó todo para los Bombarderos del Bronx, hoy menos bombarderos que nunca por un majestuoso rival.
Los Yankees se vieron obligados a recurrir a su bullpen antes de tiempo tras abandonar Luis Severino el encuentro en una cuarta entrada que completó después de recibir un bolazo en la muñeca en la eliminación de Yuli Gurriel.
Un pulso fabuloso
El bullpen de los Yankees se mostró extraordinario en la sucesión de pitchers que mantenían el pulso con Verlander, ya fuera Tommy Kahnle o Dave Robertson… hasta que llegamos a Aroldis Chapman.
Porque el entregado público del Minute Maid Park había visto cómo Verlander era capaz de completar un encuentro en el que precisó de 124 envíos para eliminar a 13 rivales vía strikeout y querían que su as recibiese un triunfo para el que había hecho méritos más que suficientes.
Con un Verlander que acaba de protagonizar una de las actuaciones más memorables en el momento más importante del año, el campo quería que se pusiese la guinda a su pastel y a ello se pusieron José Altuve y Carlos Correa.
Con un Chapman poseedor de una recta que supera las 100 millas por hora, el dúo dinámico de los Astros consiguieron poner al primero en base y tras una extraordinaria carrera por las bases después del hit de Carlos Correa, Altuve anotaba pese a que la pelota había llegado antes al plate… para no ser atrapada por Gary Sánchez.
Sin duda, una de esas secuencias que seguiremos viendo una y otra vez con la misma emoción como si se tratase de la primera vez y que pertenece desde ya mismo al Olimpo de grandes momentos en los playoffs..
De esta manera, los Astros han conseguido hacer buena la ventaja campo en esta eliminatoria al mejor de siete partidos que se marcha ahora al Bronx, donde los Yankees esperan lamerse las heridas y ser capaces de sumar su primer triunfo en una serie que se prevé tan emocionante y exigente como hemos visto en los dos primeros encuentros en el estado de la Estrella Solitaria.
C.C. Sabathia será el encargado de abrir el encuentro para los neoyorquinos mientras que Charlie Morton hará lo propio para los texanos.