Paquito-Sanyo y Mati-Maxi, primera semifinal en Lisboa

Paquito Navarro y Sanyo Gutiérrez, la pareja número dos del ránking mundial, jugarán la semifinal del Master de Portugal en Lisboa este sábado ante Mati Diaz y Maxi Sánchez, los números tres. Ambas parejas cumplieron con el guión de sus números, y las dos apelando a sus estilos de juego respectivos.

Primero Paquito y Sanyo dieron buena cuenta de Cepero y Santana, que nunca encontraron la manera de controlar la iniciativa del sevillano y el argentino, con los que cayeron por 6-1 y 6-2 en menos de una hora. Posiblemente, tras el triunfo en Sevilla, Navarro y Gutiérrez estén volviendo al nivel de juego que mostraron al inicio de la temporada, aunque se verá en la semifinal si esta apreciación es correcta.

En el segundo partido, muy irregular, Mati y Maxi tuvieron que exprimirse para ganar el primer set ante Galán y Belluati, 6-4; luego la joven pareja les pasó por encima en el segundo set, 1-6, pero en el momento clave, Díaz y Sánchez mostraron su mayor dominio de las tablas: se apuntaban a lo que dominan, y minaron de tal manera la resistencia psicológica del encuentro, que ganaron con más facilidad de la prevista tras el mal trago de la segunda manga: 6-2.

También alcanzan las semifinales Cristian Gutiérrez y Franco Stupaczuk, una de las tres parejas campeonas de la temporada. En Lisboa, donde se estrenaban como cuarta pareja cabeza de serie, han vuelto a imponer su estilo, táctico Cristian, físico Stupaczuk, y han arrollado a Moyano y Grabiel por un doble 6-3. Jugarán la semifinal ante Belasteguín y Lima.

Los número uno se encontraron en cuartos con los irreverentes Chingotto y Tello, esa pareja de enormes altibajos, pero que todo el mundo sabe que tiene un talento ilimitado, Los argentinos, pese a perder el primer juego con saque de Tello, se animaron, y acabaron por ganar 5-7 con un juego alegre, de una enorme entrega y provocando más errores de los habituales tanto de Lima como de Bela. Y ahí se acabó el partido. Luego, la maquinaria de los campeones salió a relucir, y pasaron como una apisonadora para ganar por 6-1 y 6-0 y sacar del partido y de Portugal a sus jóvenes rivales, totalmente fuera del encuentro.