Aaron Judge logra otro home run… y un récord a olvidar
El prodigioso bateador de los New York Yankees intenta irle cogiendo el pulso a la segunda mitad del año, pero hace historia mientras tanto.
Aaron Judge es un titán en todos los sentidos de la palabra. Cuando mides 2.01 y pesas 127 kilos de peso, normalmente no vas a jugar al béisbol y mucho menos vas a ser un jugador de campo. Puede que seas un pitcher, pero tu estatura suele ser un problema a la hora de mantener la coordinación necesaria para rendir al más alto nivel en el pasatiempo nacional.
Pensemos que Rob Gronkowski es un espécimen de primera magnitud, pero el tight end de los New England Patriots parece una versión más ‘condensada’ que el jugador de los New York Yankees.
En ambos casos, se trata de dos deportistas extraordinarios.
Si bien toda la atención beisbolística ha estado centrada (con razón) en Giancarlo Stanton y su prodigioso rendimiento desde el All-Star Break, su racha de encuentros consecutivos logrando al menos uno ha tocado a su fin tras seis encuentros, si pensamos en home runs tenemos que hacerlo en Aaron Judge.
En home runs y en strikeouts.
Un récord de dudoso honor
En la nueva victoria de sus Yankees frente a los vecinos de Queens, Aaron Judge fue capaz de cumplir una vez más de esa expectación y asombro que genera cada vez que uno de sus swings coloca el envío del pitcher en la estratosfera, la ionosfera o en órbita para simplificar.
No hay mejor manera para describir este home run, calculado de forma conservadora en 457 pies (139 meros), que recurrir al perfil oficial en Twitter del propio equipo.
Sin embargo, Aaron Judge ha sido capaz de lograr un récord, aunque quizás uno de esos de los que no te gustaría formar parte o que se asociara tu nombre al mismo.
Con el strikeout cometido frente a Erik Goeddel, se convertía en el primer jugador de campo que era capaz de acumular 33 partidos consecutivos, superando la marca de Adam Dunn que estableció en 2012.
Y eso que la eliminación vía strikes tuvo que esperar a la novena entrada del triunfo por 5-3 sobre los Mets, es decir, que estuvimos muy cerca de no tener el principal ‘atractivo’ para esta pieza.
No obstante, los propios compañeros de Aaron Judge no le dan tanta importancia como el resto… siempre que siga consiguiendo home runs a ese ritmo prodigioso que le permitió acumular un total de 30 en el All-Star Break y una modesta cifra de 7 unido a una paupérrima marca de bateo de .185 desde la cita de Miami.
Con esa titánica estatura hay más zonas que cubrir y los strikeouts siempre van a ocurrir para el pegador de los Yankees pese a los formidables ajustes que ha ido haciendo. Sin embargo, su porcentaje de eliminaciones vía tres strikes ha pasado del 30% hasta el 37% y no es la clase de tendencia que quieres que se mantenga en el tiempo, sobre todo si quieres mantenerte en la conversación por el MVP junto a José Altuve, Chris Sale y el sospechoso habitual de Anaheim.
La peor marca de todos los tiempos
No obstante, aunque parezca mentira, la racha de Aaron Judge no es la peor de toda la historia, pero no anda lejos. El pitcher Bill Stoneman tiene el récord con 35 partidos cometiendo al menos un strikeout y que estableció en 1971.
Es lógico pensar que la cantidad industrial de estas eliminaciones que está acumulando le pueden pasar factura hasta cierto punto, pero también lo es que nada le gustaría más que se dejase de hablar de ello, que siempre va unido a un mejor trabajo por parte de un jugador que cuando consigue algo que le gusta, la puede mandar francamente lejos.
A 457 pies o más.