Ediciones
Resultados
Síguenos en
Hola

Detroit Lions

El despreciable trato de los Detroit Lions a DeAndre Levy

El linebacker ha demandado a la franquicia por hacerle pasar por sano antes de cortarle mientras que no podía ni ponerse de pie correctamente.
Movistar Inter - Jáen en directo

Aug 22, 2013; Detroit, MI, USA; Detroit Lions outside linebacker DeAndre Levy (54) forces New England Patriots running back Brandon Bolden (38) to fumble the ball in the first quarter of a preseason game  at Ford Field. Mandatory Credit: Andrew Weber-USA TODAY Sports
Andrew WeberAndrew Weber-USA TODAY Sports

Esta es la historia de un jugador fiel a una franquicia de la NFL que, por supuesto, encontró su merecido por creer en los Reyes Magos. A su edad.

DeAndre Levy ha sido uno de los mejores jugadores de los Detroit Lions en los últimos ocho años. El linebacker fue elegido en el draft en 2009, en tercera ronda y proveniente de la universidad de Wisconsin, y siempre ha estado a las órdenes del equipo de Michigan de la NFL. Se hizo con la titularidad en el centro de la defensa en seguida y poco a poco se fue convirtiendo en un capitán y en un referente.

Su mejor año fue el 2013, cuando consiguió nada menos que seis intercepciones. Y el 2014 no le fue a la zaga en rendimiento, con 121 placajes y 2,5 sacks. El problema es que, desde entonces, las lesiones han sido sus compañeras de camino. En 2015 sólo jugó un partido y en 2016, cinco.

Es en 2016 donde todo se rompe. Primero la rodilla de Levy. Su menisco dijo basta en el partido inaugural y se temió que se perdería toda la temporada. No lo hizo porque, tras operarse, forzó para estar disponible en los últimos cuatro partidos de la campaña, incluidos los playoffs. Según él mismo declara, no es habitual en la franquicia pelear por el título de división y por jugar en enero, así que la excitación general le llevó a apurar la recuperación.

También, y en esto insiste el linbacker, porque todos los médicos del equipo le dijeron que no ponía en riesgo su futuro. Según su versión, le mintieron. Apenas veinte jugadas, en las que se le vio renqueante, sirvieron para que tuviera que volver a pasar por el quirófano y para que tenga que estar parado todo el 2017.

Es aquí donde los Lions presuntamente se la jugaron. Un día antes de que comenzase la temporada 2017, en marzo, le hicieron ir por las instalaciones del club y le mandaron pasar una prueba física. Él no lo entendía, porque ni siquiera podía ponerse en la posición de linebacker en el campo, apenas si podía andar normalmente. Y, sin embargo, los médicos del equipo de Detroit le dieron por apto para jugar.

Al día siguiente, la franquicia le cortaba y no le pagaba lo que tenía asegurado por lesión.

Por eso, ahora, les ha demandado. "He jugado con lesiones de las que el informe que se entregaba a la liga sólo contaba la mitad. He batallado cada día; he invertido muchísimo tiempo y trabajo durante casi una década y dicen que me cortan cuando estoy sano. Y, ahora, tengo que ir a un proceso legal para probar que sí que estaba lesionado. Me siento insultado y con un sabor muy amargo en la boca", dice Levy.

Nadie pide a los equipos de la NFL que sean hermanitas de la caridad. Esto es un negocio y todo el mundo lo entiende así. Pero la honestidad es innegociable. Si Levy está diciendo la verdad, la ofensa es gravísima y no bastaría con que le pagaran su asegurado contra lesiones (1,75 millones de dólares) para paliarla. Su deuda moral es mucho mayor.

DeAndre Levy quiere seguir jugando. No este año, aunque le han contactado seis equipos, porque no podrá estar al 100% hasta noviembre o diciembre, pero sí en 2018. Si consigue equipo, y lo hace bien en el campo, estaré con él si decide hacer huelga para que cobrar más, si decide irse a otro lado porque le pagan un céntimo por encima de su actual club o cualquier decisión económica que tome ¿Cómo no hacerlo? Esto es un negocio para todo el mundo. Eso sí: ser legales y dignos se ha de exigir a todas las partes por igual. Empezando por los Detroit Lions y este presunto movimiento, tan despreciable, con uno de los suyos.