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DETOCHO

Si los jugadores de la NFL estuvieran en Game of Thrones

El universo medieval de George R.R. Martin y la liga no son tan distintos como parecen.

Ciudad de MéxicoActualizado a
HOUSTON, TX - FEBRUARY 05:  Tom Brady #12 of the New England Patriots celebrates after the Patriots celebrates after the Patriots defeat the Atlanta Falcons 34-28  during Super Bowl 51 at NRG Stadium on February 5, 2017 in Houston, Texas.  (Photo by Kevin C. Cox/Getty Images)
Kevin C. CoxGetty Images

Es difícil aceptarlo, pero hubo un momento en el que no sabía qué demonios era Game of Thrones. Pero no quiero hablar de eso. Prefiero colocar esos días en el mismo archivo donde tengo guardados los dos años que utilicé anteojos en la primaria, los siete años con frenillos y aquella ocasión en que saqué un 10 en matemáticas.

Esos días han quedado en el olvido. Ahora me considero un nerd hecho y derecho. Descargué a mi teléfono el conteo regresivo para la nueva temporada. Me presento con los demás como León de la casa Girón y mi estandarte es un tarro de cerveza. Lamento si les gané la idea, si quieren mi estandarte tendrán que ir a la guerra.

Por lo mismo, la mañana del jueves desperté con una epifanía. No sé si fueron los dioses _ antiguos y nuevos _ que me susurraron al oído. O tal vez se me subió Melisandre mientras dormía (por favor, no le digan a mi señora). Pero me di cuenta que el retorcido mundo medieval que vive en la enferma mente de George R.R. Martin y la NFL no son distintos.

Después de todo, están ligados de alguna manera. Solo alguien con tantos años siguiendo a los Jets como Martin podría sonreír mientras piensa en ver el mundo arder y planea la manera más horrenda de morir. No es casualidad que el episodio de La Boda Roja haya salido al aire apenas meses después del “buttfumble”.

Ahora imagínense lo que pasa por la cabeza de un aficionado de los Browns.

Intrigas, excesos, sexo salvaje y maneras absurdas de morir y sobrevivir. Durante seis temporadas, Game of Thrones se ha convertido en un estilo de vida con una fórmula muy simple: arrancar capítulos enteros de las vidas de Lawrence Taylor, Rex Ryan y Johnny Manziel, combinarlos y trasladarlos a otra época a fin de evitar cualquier demanda por plagio.

Me imagino que dentro de esta enorme comunidad amante del football habrá a quien no le guste Game Of Thrones. Quien no lo haya visto o a quien simplemente no le interesa. Está bien, se vale. Los perdono. Tienen derecho a eso y a un juicio por combate.

Pero a los que sí disfrutan de la serie y ya comenzaron a leer esto, es inevitable que hayan llegado hasta acá sin ponerse a pensar: ¿quién es quién? Esa resulta en una pregunta muy complicada. Motivos, sobran.

La serie está repleta de personajes y personalidades. Hay muchas mentes perversas y traicioneras que solo ven la manera de acceder o permanecer en el trono. Pero el roster de los Patriots solo tiene 53 jugadores.

Pero basta de perder el tiempo. Es hora de irnos directamente a Westeros. Y, con fines dramáticos, creo que es el momento en el que todos empecemos a entonar en la mente la melodía de los créditos iniciales.

Cersei Lannister: Adorada y aborrecida. Imposible no pensar en Tom Brady, cada que vemos a Cersei sentada en el trono de hierro. Ambos hicieron todo lo que tenían que hacer, y un poco más, por llegar hasta ahí. Ciudades arderán y morirá quien tenga que morir antes de que estén dispuestos a ceder lo que todo el mundo quiere quitarles. Más de uno quisiera gritarles “Shame, shame, shame” cuando los encuentre por la calle.

Petyr Baelish “Meñique”: Traicionero y manipulador, durante mucho tiempo el poder detrás del poder. Cualquier parecido con Bill Belichick es mera coincidencia. Ambos están jugando ajedrez, mientras que el resto del universo juega damas chinas.

Jon Snow: ¿Quién hubiera esperado algo de un bastardo que traicionó a la Guardia de la Noche? Tal vez la misma persona que habría esperado algo de un quarterback que cayó hasta la posición 24 el día del draft y pasó sus primeras tres temporadas calentando pino, como Aaron Rodgers. Para muchos, el verdadero merecedor del trono.

Daenerys Targaryen: Cuando se tienen tres dragones y más nombres de los que muchos podrían contar, eres un serio candidato al trono. ¿Cómo se llaman esos dragones? Ah, cierto, Dak Prescott, Ezekiel Elliott y Dez Bryant. Pero al igual que a Daenerys, a los Dallas Cowboys los desnudan con facilidad en momentos de apremio. La única diferencia es que a los Cowboys nadie los quiere ver.

Tywin Lannister: Al igual que el comisionado Roger Goodell. Tenía todo el dinero y todo el poder. Hasta que se quiso meter con quien ocupa el trono. Y aceptémoslo, de toda la liga, Goodell es el que tiene más posibilidades de morir sentado en el WC.

Tyron Lannister: Universalmente popular, respetado y con una inteligencia por encima del resto de los personajes. Demasiado bajo para su posición. No sé ustedes, pero a mí me suena a Drew Brees. Una persona a la que todos quisiéramos ver en el trono, pero también estamos conscientes de que posiblemente no vaya a suceder. Si tan solo Brees tomara como Johnny Manziel, esta discusión ya habría acabado.

Jaime Lannister: Nada que debatir, es Eli Manning. Nadie sabe si es bueno o si es malo. Pero si sabemos que es la persona de la que menos sospecharías que le ha hecho cosas indecibles a Cersei (Brady)… y en más de una ocasión.

White Walkers: Estuvieron muertos durante muchos años, pero ahora han revivido. No se sabe si al final van a ganar, pero todos saben que este año van a dar guerra. Les sobra actitud. Sí, al igual que los Oakland Raiders.

Ramsay Bolton: Si te gusta jugar con los perros, solo puedes ser Michael Vick.

Arya Stark: Nadie se sorprendió cuando se convirtió en asesina profesional. Me pasa lo mismo cada que veo a Ndamukong Suh.

Ned Stark: Al igual que el patriarca Stark, todos pensamos que Andrew Luck iba rumbo al trono, pero perdieron la cabeza demasiado pronto.

Hodor: Todos lamentamos cuando se fue, pero ahora regresará como White Walker. Sí, nos referimos a Marshawn Lynch. Un caminante blanco en Beast Mode.

Theon Greyjoy: Fue Rey en el Norte. Hizo cosas horribles y le han pegado más de lo que cualquier hombre debería soportar. El hombre quebrado, sin embargo, aún puede ser fundamental para ayudar a que alguien ocupe el trono. ¿Ben Roethlisberger, eres tú?

Sandor (el perro) y Gregor (la montaña) Clegane: Cuando los ves del otro lado no queda más que tener miedo y ponerte a pensar cómo hacer para detenerlos. Son dos personajes que todo el mundo quiere de su lado y que podrían ayudar a ganar más de una guerra. Odell Beckham y Antonio Brown, damas y caballeros.

Joffrey Baratheon: Aaron Hernandez. ¿Necesito una explicación?

Tormund: Si yo voy a una guerra, quiero a Tormund y a J.J. Watt en mi campamento.

Stannis Baratheon: Al igual que Russell Wilson, Stannis Baratheon pudo haber llegado al trono que le pertenecía por derecho, pero le hicieron caso a la persona equivocada. Stannis a la bruja roja y Wilson al tipo que le pidió un pase y no darle la bola a Marshawn Lynch.

Jaqen H’ghar: Al igual que Gregg Williams, su labor es la de entrenar asesinos.

Tommen Barathein: El menor de la dinastía Baratheon quiso unir al reino con la iglesia y murió virgen. No es nada personal, Tim Tebow.

Y ahora, mi guardia ha terminado.