Los Miami Dolphins no deben renovar a Jarvis Landry

Los Miami Dolphins no han ofrecido una extensión de contrato a Jarvis Landry, según ha informado el Miami Herald. Aunque la información deja la puerta abierta a un acuerdo, lo cierto es que el equipo no parece tener demasiada prisa para sentarse a negociar con el WR. El artículo deja entrever que, quizás, Adam Gase no tenga en mente comprometer demasiado espacio salarial en un receptor de slot. ¿Y sabéis que? Creo que lleva toda la razón

Landry tiene potencial de estrella y querrá cobrar como tal

Jarvis Landry es un crack. Eso que vaya por delante. Un jugador muy elusivo que desde el slot es capaz de romper a casi cualquier defensa de la NFL. Lleva tres años en la liga y ya ha logrado dos temporadas de más de 1100 yardas.

Los Dolphins han llegado a un punto de no retorno. El crecimiento de jugadores como Tannehill, o el propio Landry, ha llegado donde el equipo quería. Hoy por hoy, son uno de los equipos que deben pelear, en la AFC, por llegar a playoffs y en un futuro, no muy lejano, buscar objetivos mayores.

Pero para mantenerse en la cumbre hay que saber renovarse, y manejar muy bien las finanzas. Hace unos años los Dolphins eran un equipo a la deriva. Contaban con mucho espacio salarial y no sabían hacia dónde ir. Eso cambió con la llegada de Ryan Tannehill, un quarterback en el que fundamentar el ataque y Ndamukong Suh, pieza fundamental de la defensa. El equipo fue poco a poco creciendo y aglutinando talento joven que en esta temporada deben dar el do de pecho.

Entonces, ¿Por qué no renovar a tu mejor receptor?

Landry tiene 24 años y un futuro brillante en la NFL. Pero cuando se siente a negociar, máxime si logra una nueva temporada de más de 1000 yardas, buscará un contrato a la altura de los mejores WR de la liga. Es lícito, pero no creo que sea lo mejor para estos Dolphins.

El cuerpo de receptores del equipo cuenta con un Kenny Stills más que solvente en profundo y con un diamante en bruto, DeVante Parker. Este debe ser el jugador del futuro para los Dolphins y en quién depositar las ilusiones y, posteriormente el dinero.

Un receptor de slot, a muy bueno que sea, y mira que Landry lo es, no tiene tanto peso en el equipo como para hipotecar tu futuro por él. Parker tiene el físico para convertirse en el próximo Dez Bryant o A.J Green, pero debe demostrarlo. Si este año funciona, los Dolphins se plantearán mucho si les merece la pena gasta el dinero en un jugador como Landry.

El equipo está montado, con o sin Landry

La defensa de los Dolphins está lista para competir. La vuelta de Reshad Jones aportará liderazgo a una secundaria veterana, pero que ya debe ir planteándose la reconstrucción. A jugadores con Byron Maxwell o Nate Allen no les queda mucho en el tanque y el equipo debe virar sus ojos hacía esa zona del campo.

Ryan Tannehill, es el quarterback, y por ende, líder del equipo. El joven ya tiene su contrato de QB franquicia, aunque muy bien tratado por parte de los Dolphins. Otros como Ajayi o Bushrod están a punto de renovar y las arcas de Miami no van demasiado boyantes.

Por todo esto, creo que la franquicia debe esperar este año. Y, aún a riesgo de que Landry pueda llegar a probar las mieles de la agencia libre, observar las evoluciones de DeVante Parker.

Si este jugador no termina de demostrar todo el potencial que lleva dentro, entonces sí que apostaría por una renovación por todo lo alto para Landry, pero tengo tantas expectativas con Parker, que no me cabe duda de que este año acabará siendo el WR1 del equipo y relegando a Landry a un segundo plano, lo que repercutirá negativamente en su futuro contrato, al menos con los Miami Dolphins. Quizás los Dolphins busquen en el futuro un trade por él, al más puro estilo New Orleans Saints con Brandin Cooks y seguir apuntalando al equipo…