Un nuevo régimen garantizará el éxito de Russell Wilson
El quarterback de Seattle Seahawks no para en su empeño de convertirse en referencia de la NFL y consume 4800 calorías diarias para ello.
La campaña 2017 no fue la más positiva para Russell Wilson, no solo por los éxitos (o la falta de ellos) con los Seattle Seahawks, que cayeron en ronda divisional frente a los Atlanta Falcons, sino por la interminable racha de lesiones y dolencias de todo tipo que lastraron una temporada en la que notó que le faltaba algo, un pequeño matiz o esa ventaja que le hiciese mantenerse en la cúspide de su profesión en la NFL.
Al igual que ocurriera con el caso de Tom Brady, cuyo manual para mantener una armonía entre cuerpo y mente gracias a la vía nutricional y que se vendió como rosquillas por la módica cantidad de 200 dólares es la clave de sus éxitos pasados, presentes y futuros (sin desmerecer lo que haga el Tito Bill, lógicamente), Wilson ha decidido que su piedra filosofal, su Santo Grial es ni más ni menos que cómo cuida su alimentación.
La identidad del gurú
Gracias al artículo que ha publicado Sheil Kapadia para ESPN, Russell Wilson se ha hecho un firme creyente en Philip Goglia, que se ve a sí mismo más como un entrenador para la alimentación en lugar de un nutricionista.
Para todos nosotros que desconocemos quién es este nuevo gurú para el quarterback de los Seahawks, decir que si se busca su nombre junto al de otros ilustres famosos, nos encontramos con Kim Kardashian o Chris Pratt. Sin desmerecer el primer ejemplo perteneciente a la saga Kardashian y cuyos méritos son harto conocidos en el ancho mundo, la figura esculpida del actor en Jurassic World o en las dos entregas de Guardianes de la Galaxia sí que nos ofrece un anticipo de lo que podría estar por llegar para el bueno de Russell.
Según ha relatado el propio Wilson, acudió a la oficina de Goglia siguiendo el consejo de su mujer Ciara y de su antiguo entrenador personal el pasado mes de marzo, afirmando que se encontró demasiado pesado a lo largo de 2016, cuando pesó 225 libras (102 kilos) y que eso le condicionó a la hora de ser menos ágil a la hora de evitar los placajes y las lesiones, como el esguince de rodilla que sufrió en la semana 3.
Asimismo, tampoco corrió tanto como antaño y apenas acumuló 259 yardas de carrera, mientras que el equipo se desplomó hasta la posición 23 de la NFL, cuando en sus cuatro primeros años no acabó por debajo de la séptima posición.
El nuevo régimen
Lo que Goglia tuvo muy claro desde el principio fue que había que cambiar los hábitos alimenticios de Wilson, que no deja de ser un atleta de élite y cuyo metabolismo le obliga a consumir grandes cantidades de calorías para poder quemar la grasa. El gurú ha decidido que el jugador debía pasar de las 2700 habituales a las 4800 calorías diarias a lo largo de las nueve comidas que ingiere a lo largo de cada jornada.
Unido a un exhaustivo régimen de entrenamiento que sigue Wilson, le ha permitido bajar hasta las 215 libras (97 kilos) y reducir el porcentaje de grasa en su cuerpo del 16% al 10% en la última medición a la que se ha sometido.
Russell Wilson está decidido a recuperar su lugar entre la realeza de la posición en la NFL, y con esta nueva herramienta a su disposición más una espartana disciplina, seguro que lo consigue… o le sitúa en el camino adecuado.
Aunque si tuviera una mejor línea ofensiva, también le vendría bien para llevarse menos sustos cada fin de semana.