Con una sonrisa de pícaro y un boxeo eléctrico Samuel Carmona se presentó ante la sociedad española el pasado agosto en los Juegos Olímpicos de Río. El ‘Patriarca’ quería traerse a España la primera medalla olímpica en boxeo en 16 años, lo bordeo, pero se quedó a las puertas . Aun así consiguió ganarse a la afición, quien comenzó a vibrar con sus combates a través de la pequeña pantalla. Su participación en Río fue un salto cualitativo y cuantitativo . Carmona pasó a ser uno de los púgiles más valorados dentro del boxeo amateur.
Las grandes promotoras quisieron echarle el lazo, pero el canario lo tiene claro “ primero es Tokio 2020, después será profesional” . A sus 20 años luce una gran templanza para su futuro, la cual le hizo optar por las World Series of Boxing (híbrido entre el boxeo olímpico y el rentado). En esa competición no conoció la derrota, maravilló, pero sobre todo siguió su progresión. Su rapidez sobre el ring también la utiliza para marcarse retos y tras finalizar ese torneo puso sus miras en el siguiente objetivo: ser campeón de Europa.
Con unas sensaciones inmejorables, Carmona se planta en el Europeo como uno de los serios favoritos para llevarse el oro en la categoría de menos de 49 kilogramos . Éste lunes debuta y lo tiene claro. “Me veo con muchas posibilidades , la verdad que me encuentro muy en forma, motivado y creo que tengo probabilidades altas de ganar. Me colgaré el oro ”, asiente confiando con un marcado acento canario.
El británico Galal Yafal es el boxeador que más le preocupa en su categoría , pero le ganó en las World Series of Boxing, evento que le ha dado un plus en su carrera. “He crecido mucho gracias a esa oportunidad, me motivaba mucho y esas peleas me han ayudado a mejorar . Además el trabajo que hago diario también me hace tener avances constantes, por ello estoy muy confiado”, apunta.
Carmona es un referente para los otros cuatro españoles que compiten Ucrania ( Gabriel Escolar, Jos é Quiles, Johan Orozco y Alejandro Camacho), pero sobre todo el canario es un líder. “La concentración está siendo larga, pero inmejorable. Somos una piña, todos llegamos fuertes y tenemos opciones de ganar ”. La victoria es su objetivo. En Río buscó romper una sequía de 16 años, en Ucrania quiere ‘liquidar’ una cuenta de 50 años sin campeón de Europa amateur.