Gervonta Davis, primera defensa bajo el abrigo de Mayweather

En Baltimore (Maryland, Estados Unidos) hay un Tiburón, Michael Phelps. El nadador es la personalidad, junto con David Hasselhoff, más conocida de la ciudad. Pocos pueden hacerle sombra, pero en esa tesitura se encuentra Gervonta Davis (17-0, 16 KO), quien quiere marcar una época en el boxeo mundial de la mano de Floyd Mayweather. ‘Tank’ creció en un barrio marginal de la ciudad, el mismo en el que se inspiró la serie The Wire. Con cinco años se puso los guantes para huir de la marginalidad, lo que desembocó en una brillante carrera amateur (206-15).

En 2013 debutó como profesional y en 2015 coincidió con el que se convertiría en su mecenas: Floyd Mayweather Jr. ‘Money’ lo fichó para su promotora. Las opciones de marcar una época se multiplicaron. Davis es rápido, potente y letal sobre el ring, cualidades que le sitúan con un futuro prometedor, sólo tiene 22 años. Además, cuenta con el apoyo de Mayweather, lo que le ha ayudado a abrirse puertas. De su jefe ha aprendido bien, sabe llevar el show, crear expectación y cumplirla sobre el ring.

Con todos esos ingredientes noqueó el pasado enero al invicto José Pedraza, ganando el título mundial del peso superpluma por la Federación Internacional de Boxeo (IBF, en inglés). ‘Tank’ tenía su prueba de fuego y la pasó con nota, pero Mayweather quiere que su protegido tenga un gran nombre cuanto antes. Por ello, no han tardado en afrontar otra dura prueba. Davis sale por primera vez de Estados Unidos para pelear en Inglaterra, allí se verá las caras este sábado con otro invicto y gran prospecto de las islas, Liam Walsh (21-0, 14 KO).

A pesar de esa vitola, Walsh no es una joven promesa como Davis, tiene 30 años y debe coger la oportunidad que se le presenta si quiere hacerse un hueco en el panorama mundial. El púgil de Rochdale ha tenido una carrera más pausada que la de su rival el sábado. Walsh ganó su billete al título IBF tras derrotar con autoridad a Andrey Klimov. Esa victoria le dio el pase otra vez al título, ya que su primera ocasión de pelear por un mundial se la tuvo que perder por una lesión. Ahora, llega para medirse a otro zurdo, otra promesa. Púgiles muy similares, con mucho ritmo y gran futuro, Davis tiene a su favor mayor pegada. Sobre el ring se verá quien sigue su camino al éxito y quien lo ve frenado.