Ferran Latorre, preparado para coronar su último 8.000
El alpinista habrá ascendido a los 14 picos más altos del planeta sin oxígeno. Se convertirá en la decimosexta persona que lo hace.
Si todo va según lo previsto, el alpinista Ferran Latorre se convertirá el próximo 20 de mayo en la decimosexta persona que corona las 14 montañas más altas del mundo sin oxígeno. Un reto mayúsculo que encara con la ayuda de CaixaBank, pero que pudo completarlo hace ya varios años. Con una ventana de tiempo fantástica y con todo de cara, Latorre estaba ascendiendo el Everest (el único 8.000 que le queda) cuando se encontró a un sherpa abandonado por una expedición que iba por delante suyo. Con claros síntomas de sufrir un edema cerebral, Latorre le administró las dos inyecciones de dexometasona que llevaba. Le salvó la vida, pero se acabó su ascensión.
Así pues Latorre, acompañado de dos de los mejores himalayistas del planeta, arrancará este domingo la expedición para coronar su decimocuarto ochomil, que no es otro que el Everest. La ascensión al pico más alto del planeta, además, lo realizará por la cara sur, siguiendo así los pasos de Sir Edmund Hillary, primera persona en ascender la mítica montaña en 1953. No es quizás la más difícil que haya escalado, pero sin duda la que más se le resiste: lo ha intentado en seis ocasiones. Además, es un pico que le emociona: "A los 13 años me prometí que subiría el Everest y aquí estoy, después de 33 años, preparado para hacerlo". Pero llegar hasta aquí, ascendió su primer 8.000 en 1999, no ha sido fácil: "Ha sido un camino muy largo, considero que es una suerte llegar aquí. No es que haya sido difícil, es que ha sido directamente un milagro. Creí que lo imposible era posible", zanjó Latorre.
Pero la ascensión de Latorre no tendrá solamente una finalidad deportiva o histórica, sino también médica. Durante la misma se llevará a cabo el proyecto "Sherpa-Everest 2017", impulsado por la Fundació Bancària La Caixa, y que pretende analizar el impacto genético, fisiológico y biomédico de la falta de oxígeno. El objetivo del mismo es identificar qué factores afectan a la adaptación del cuerpo a la hipoxia y ver como se recupera un individuo tras haber pasado tiempo con poco oxígeno. Con los resultados se pretende ayudar no solo a los alpinistas de élite, sino a todos los que cada año se exponen a alturas elevadas así como a los pacientes con enfermedades respiratorias crónicas, que viven constantemente con menos oxígeno que una persona sana. Se calcula que es el 15% de la población, por lo que el impacto del estudio puede ser enorme.