Muratovic: "El descenso no sería un drama para el Cangas"
El montenegrino del equipo gallego sabe que "le quedan ocho finales al equipo", ahora último clasificado de la Liga Asobal.España-Francia: Europeo de Balonmano 2018 en directo
"¿Se salva el Cangas, Alen?" Es una pregunta a bocajarro que sólo tipos como Muratovic son capaces de encajar con naturalidad y de contestar con prudencia, pero sin esconderse: "Pues está difícil, porque somos los últimos de la tabla, y bajan dos, pero quedan ocho partidos, ocho finales, y vamos a pelear. Uno de esos choque es con el Benidorm, que también se juega la vida, y con Zupo Equisoain en el banquillo es un equipo muy complicado".
Alen Muratovic (1979) es un montenegrino que aterrizó en España para jugar en el Cangas en la campaña 2003-04. Sólo duró dos años en el equipo gallego, porque en aquellos años Manolo Camiña, el presidente del club, utilizaba su buen ojo para fichar jóvenes con proyección, que en un par de años vendía y así mantenía el club con esas inversiones. El Valladolid pagó para llevarse al montenegrino, que después de tres años se marchaba a la Bundesliga, para jugar en el Flensburg, pero en su segunda temporada, adiós: rotura del hombro derecho, y descartado para el balonmano.
Cuatro años después de que le incapacitasen para el deporte, regresó a las pistas con el Cangas, donde estaba establecido con su mujer. "Estoy en su segunda vida deportiva. Ya no puedo tirar con fuerza, pero aún salto y se engañar a las defensas y a los porteros", le gusta bromear.
El caso es Muratovic es del Cangas como si fuese un chico de casa, "porque es mi casa", y casi de la cantera, por la edad en la que se unió al club. Por eso reconoce "el esfuerzo que se hace para estar en la Asobal. Este año se fueron jugadores importantes, y se ha tirado con jóvenes. Y les falta experiencia. Si se baja no será un drama, porque al siguiente se sube. Hay chicos de calidad en la plantilla, que les falta tiempo, pero van a ser competitivos".
Respecto a qué hará él si el equipo desciende, pues "no se sabe, Lo que diga Camiña", el presidente, casi un padre para Alen. "Mientras pueda aportar algo, aquí estaré, aunque ya me pesan los años: soy el lateral izquierdo más viejo de la Liga", le gusta recordar.