Jay Cutler: Un talento en paro a la espera de una oportunidad
Un jugador como él, con talento aunque sin cabeza, debe ser paciente. Seguro que en el último momento alguna franquicia con urgencias le fichará.
Un jugador descontento con su roll, un veterano que termina contrato o simplemente un jugador que ha sido cortado por no rendir al nivel que de él se espera, este tipo de situaciones se viven cada año en la offseason de la NFL. Se hace especialmente habitual en la posición de quarterback, y es que ser el jugador más importante del terreno de juego no es algo baladí, para lo bueno y lo malo.
Lo bueno y lo malo de ser quarterback en la NFL
Lo malo de ser QB es que todos los focos están en ti. Todo lo malo que le ocurra al equipo repercute directamente en tu contrato, por ello ser agente libre es algo habitual en los quarterbacks de nivel medio o que han rendido por debajo de lo esperado.
Lo bueno de ser quarterback es que ninguna franquicia quiere jugársela en la posición más importante del juego. Por eso muchos veteranos encuentran acomodo rápido. En esta offseason lo hemos visto con jugadores como Johs McCown o Brian Hoyer. Ser un QB fiable te permite tener una carrera más o menos longeva en la liga, aunque tengas que buscar tu sitio en varias franquicias y termines como sustituto.
La temporada pasada vivimos el caso de Ryan Fitzpatrick. El ex QB de los Jets venía de un muy buen año en el equipo y pidió cobrar como cualquier titular de la posición. Sin embargo, en Nueva York no querían pagarle por encima del precio que ellos creían. Llegaron a un acuerdo intermedio y Ryan consiguió un contrato de un año y 12 millones, cuando pedía en torno a los 17.
Jay Cutler llega por primera vez a la agencia libre
Este año además de los casos de Tony Romo y Kirk Cousins, grandes dominadores de la offseason en la NFL, tenemos a Jay Cutler. El ya ex QB de los Bears prueba por primera vez las agencia libre, recordar que llegó a Chicago vía trade con los Broncos, y con 33 años aún debería tener football en sus manos.
Ha día de hoy ningún equipo ha ofrecido un contrato a Jay Cutler. Lo único que de él se ha escuchado han sido vagos rumores de un posible interés de Jets y Dolphins. Aunque para muchos no sea un QB top, que no lo es, hay que darle el beneficio de la duda por encima de jugadores como Josh Johnson o Mark Sánchez, reciente fichaje de los Bears.
Cutler ha sido, con sus luces y muchas sombras, un titular sólido de la NFL. Se esperaba mucho más de él, pero nadie le discute el talento y el aplomo para salir de situaciones complicadas con pases que están a la altura de muy pocos. Su bagaje en la liga, y su potencial, son dos activos a su favor para llegar a cualquier equipo necesitado. Muchos quarterbacks han encontrado acomodo en diferentes franquicias como suplentes, y aunque cada vez hay menos destinos posibles, Cutler no debe ponerse nervioso.
En agosto entran las prisas y los `cángueles´
La agencia libre avanza y los equipos van cerrando sus plantillas. Pero llegará agosto y más de uno, y de dos, tendrán dudas y les entrarán las prisas por encontrar a su quarterback titular, o un suplente de garantías. Además, hay que contar con el factor lesión, que se lo pregunten a los Vikings y Sam Bradford.
Jay es un quarterback sin futuro como titular a día de hoy, pero si es paciente seguro que le llegarán ofertas y podrá continuar su carrera en la liga. Perdió el tren de ser una estrella, y mira que se le pagó como tal, pero está a tiempo de evolucionar y convertirse en un jugador como Brian Hoyer que, mal que bien, ha sabido encontrar su sitio en la NFL. De él dependerá, talento tiene, y experiencia también, sólo falta que acepte dar un paso a un lado y se centre, que, quizás, sea mucho pedir.