Su esencia: La sensación de inicios de los años 90

El nacimiento de los Toronto Blue Jays fue complicado desde el inicio, no solo al llegar a conquistar un territorio de hockey, sino intentar hacerlo mientras se acumulaban al menos 100 derrotas en sus primeros tres años. Eventualmente, se ganaron el corazón de muchos a inicios de los 90 tras una racha notable de éxitos a mediados de la década anterior, cuando finalmente llegaron a la Serie Mundial en años consecutivos (1991 y 92) para alzarse como campeones. Su momento más preciado es el inolvidable jonrón de Joe Carter sobre Mitch Williams que puso fin al Clásico de Otoño, un instante que ha perdurado por siempre y para siempre en la memoria de los aficionados del pasatiempo nacional

Propietario: Rogers Communications ***

Ahora todo tiene sentido. Cuando los Blue Jays se manejan con actitud bravucona, en especial José Bautista, no es porque haya algo malo, es solo el hockey que corre por sus venas. Rogers Communication, el gigante de la comunicación canadiense en telefonía, internet y televisión, también tiene una fuerte alianza digital con la NHL.

General manager: Ross Atkins ***

El primer año para Atkins al frente rindió buenos dividendos con un viaje a la antesala de la Serie Mundial por segundo año fila. El año dos promete mayores desafíos ahora que no pudo retener al toletero dominicano Edwin Encarnación. Sin embargo, no hay razones para apretar el botón del pánico al norte de la frontera, a fin de cuentas Toronto está equipado con una de las rotaciones más sólidas de Grandes Ligas, el MVP de 2015 y mucho talento joven. En su primera temporada adquirió a Melvin Upton, Joaquin Benoit, Scott Feldman y Francisco Liriano para hacer una carrera rumbo a playoffs y quedan pocas dudas de que lo volvería a hacer si fuera necesario.

Entrenador: John Gibbons ***

Nadie va a acusar a John Gibbons de ser suave o de tener un carácter accesible. Mucho menos sus jugadores. Frontal, testarudo y por momentos conflictivo, Gibbons ha tenido una serie de roces con umpires y sus propios peloteros por igual. Pero al mismo tiempo, le ha inyectado su personalidad a un equipo que parece un imán para la polémica. Pero en Toronto, esa fórmula parece funcionar a la perfección. Tan solo hace dos años, Gibbons fue el responsable de romper con un maleficio de 22 años de los Blue Jays sin un viaje a la postemporada y repitió el truco la campaña anterior, quedándose en ambas ocasiones en la puerta de la Serie Mundial, lo que no está nada mal.

Su gran estrella: José Bautista

A pesar de contar con 36 años y de venir de su peor campaña en cuatro años, el dominicano sigue siendo una fuerza en el orden al bat. Amenaza de cuadrangular siempre que venga a batear, también es un imán para la polémica. Mayores referencias en Odor, Rougned.

Estrella ofensiva: Josh Donaldson

Nunca nadie va a confundir a Josh Donaldson con un Guante de Oro, pero lo que no da con el cuero, lo compensa con el madero. El antesalista es una de esas raras especies de pelotero que han alcanzado la cima y sigue mejorando año con año. Jugador Más Valioso en 2015, Donaldson se ha convertido en una máquina de bateo. No solo de cuadrangulares, de los que por cierto, promedia 32.7 en sus cuatro temporadas completas, sino que en ese mismo lapso, su menor cantidad de extrabases en una campaña es de 62 en 2014 y en su año de MVP llegó hasta los 84. Más importante es el hecho de que desde que se estableció como titular, ha jugado al menos 155 partidos al año. Toronto va a tener que abrir la cartera si lo quiere retener.

Pitcher estrella: Aaron Sánchez

A Aaron Sánchez no le tomó mucho tiempo demostrar que estaba listo para ser un abridor estelar en Grandes Ligas. En cuestión de un año y medio se estableció como abridor y el año pasado dio el ansiado salto al estrellato. Siempre va a ser bienvenido un zurdo capaz de lanzar una recta de más de 95 millas por hora, en especial si es capaz de combinarla con un sinker que obligue a muchos rodados, pero esa no es su principal virtud. Más allá de una efectividad de 2.84 a lo largo de sus dos años y medio en Grandes Ligas, el aspecto que más le gusta a los Blue Jays de Sanchez es el hecho de que cuenta con apenas 24 años de edad y no será agente libre hasta la campaña de 2021, por lo que tiene impacto mínimo en la nómina.

Rogers centre: Maravilla de la arquitectura

El hecho de que el primer estadio con domo retráctil apareciera en Canadá seguramente fue una bofetada para Estados Unidos, en especial para el “pasatiempo nacional”, y a pesar de que ya se acerca a los 30 años de vida, el tiempo no parece pasar por Rogers Centre.La casa de los Blue Jays sigue siendo funcional, dinámica y moderna y la próxima temporada dejará de ser uno de dos estadios con superficie artificial. Pero se mantendrá con el único con hotel integrado con 78 habitaciones con vista al campo.

Paraíso para bateadores.

Las medidas están por debajo de la media de la competición, pero la distancia a izquierda y derecha invita a intentar sacarla de campo. Aquí se producen muchos hits de bases extra, resultado de la hierba artificial.

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