Jan Farrell, Top-10 en el inicio de temporada en Canadá
El esquiador afronta la temporada con optimismo pese a esperar un resultado mejor. "Debo gestionar mejor mis miedos para ir más rápido".
Los hombres y mujeres más rápidos del planeta se han dado cita, un año más, en la localidad canadiense de Sun Peaks, donde estaban previstas las tres primeras pruebas de la Copa del Mundo de Speed Ski, el deporte no motorizado más veloz de la tierra. Durante los días 6, 7 y 8 de marzo, 48 deportistas de 12 países han descendido a toda velocidad por los 585 metros de la pista de Headwalls con el objetivo de alzarse con la victoria en las primeras pruebas puntuables del mundial.
El esquiador italiano, Ivan Origone, ha sido el vencedor de la primera prueba de la temporada 2017, celebrada el lunes, al alcanzar 144,06 kilómetros por hora, por delante del francés Bastien Montes (143,75 kilómetros por hora) y el austriaco Manuel Kramer (143,72 kilómetros por hora). En la categoría femenina, la vencedora ha sido la italiana Valentina Greggio, actual campeona del mundo, con una marca de 142,83 kilómetros por hora, por delante de la francesa Celia Martinez (141,60 kilómetros por hora) y de la sueca Britta Backlund (140,20 kilómetros por hora).
El martes, en la misma pista de Headwall, durante la segunda prueba puntuable de la Copa del Mundo, el esquiador Manuel Kramer logró la mejor marca de la jornada: 163,79 kilómetros por hora. El segundo clasificado fue el italiano Simone Origone (163,61) y el tercero, Bastien Montes, con 163,52 kilómetros por hora. Valentina Greggio volvió a ser la más rápida en la categoría femenina con una marca de 161,29 kilómetros por hora, seguida de dos participantes suecas: Britta Backlund (157,05 kilómetros por hora) y Hanna Matslofva (156,89 kilómetros por hora).
La última prueba de la Copa del Mundo tuvo que ser suspendida porque la pista canadiense estaba excesivamente peligrosa para la competición debido al cerca de medio metro de nieve virgen caída a lo largo de la madrugada. De esta forma, los corredores acumulan dos pruebas puntuables para la general de la Copa del Mundo, liderada por Manuel Kramer en la categoría masculina y por Valentina Greggio en la femenina.
Jan Farrell, en el top ten en Canadá
El esquiador, afincado en Madrid y que ostenta el récord del mundo de velocidad en pista cubierta y sobre asfalto, ha logrado el décimo puesto en la primera jornada y el noveno puesto en la jornada del martes en Sun Peaks. Su décima posición en la clasificación general supone un contratiempo en su comienzo de temporada. “Debo trabajar duro en Idre y Grandvalira para remontar la clasificación”, ha declarado Jan tras el final de la tercera jornada del Campeonato del Mundo de Speed Ski en Sun Peaks, Canadá.
Jan Farrell logró su mejor marca durante la segunda jornada, logrando una velocidad punta de 158,58 kilómetros por hora. El esquiador valora este resultado, pero confía en seguir escalando posiciones en la próxima cita de la Copa del Mundo de Speed Ski, que se celebra en Idre Fjäll, Suecia, el próximo 23 de marzo.
“Unos elegimos mejores líneas de bajada que otros, pero la pista estaba en condiciones muy complicadas para todos; el último muro parecía una pista de baches, como puede verse en los vídeos. Debo dejar atrás los miedos del pasado, como la caída del año pasado en Vars (Francia), y no dejar que tomen las riendas en la parte final de la pista. Mis bajadas eran seguras, pero no lo suficientemente rápidas. ¡Tengo que atacar más!”, afirmó Jan después de su participación en las primeras pruebas de la temporada.
El esquiador estrenó en esta primera parada de la Copa del Mundo su nuevo casco con los colores de la Unión Europea. Jan Farrell quiere dedicar sus descensos a toda Europa ya que, como ha declarado en varías ocasiones, se siente en casa en todos los países que conforman la Unión.
Falta de visibilidad y viento
Las condiciones meteorológicas no han permitido a los competidores de este vibrante deporte acercarse al récord de la pista que ostenta Kenny Dale desde 2014 con una velocidad punta de 178,22 kilómetros por hora, ni mucho menos a la mejor marca histórica de este deporte que sigue en manos del italiano Ivan Origone, con una velocidad de 254.958 kilómetros por hora.
La pista canadiense de Headwalls en Sun Peaks, la única no europea del circuito, se caracteriza por su alto grado de dificultad técnica ya que, además de una inclinación que alcanza el 55%, durante el descenso libre aparecen dos tramos con ondulaciones que, teniendo en cuenta las altas velocidades, afectan al contacto de lo esquís con la nieve. Los corredores deben absorber los cambios de rasante para ganar velocidad.