Así es la plantilla de los Marlins línea por línea

Catchers **

Uno de los mejores exponentes del potencial de los Miami Marlins es el progreso experimentado por su catcher titular, J.T. Realmuto, que forma parte de un núcleo que llegó a competir hasta bien avanzada la temporada anterior. Dotado de una interesante mezcla de potencia y velocidad, este jugador fue capaz de llegar hasta el clave .300 de media de bateo pese a una mejorable relación entre bases por bolas y strikeouts, mientras su juego de carrera volvió a lucir especialmente. No obstante, queda por ver si con una disciplina tan mejorable será capaz de mantener esa media de bateo, que no es nada sencillo. El veterano Ellis llega hasta Florida para dar el descanso habitual a Realmuto y traspasar sus extensos conocimientos en la posición.

Infielders **

No sería descabellado pensar que Justin Bour es lo que es, un jugador con potencial, pero que no podrá cumplirlo por su incapacidad de rendir frente a los zurdos en esos enfrentamientos de su mismo perfil. Pese a esas limitaciones, su pegada es incuestionable y la clave volverá a ser si es capaz de conseguirlo, puesto que el club tiende a ello. De esta manera, la mayor carencia de los Marlins, que es su dificultad a la hora de sacarla del campo, sería menor. Dee Gordon tiene mucho que demostrar después de su aciago 2016, marcado por su sanción por dopaje. Hay que pensar que sus habilidades no son producto de ello y que será una pesadilla para los rivales. Hechavarría aporta su habitual guante notable, aunque el ataque siempre ha ido a remolque y se encuentra ante el momento de la verdad a sus 27 años. Martín Prado es un prodigio de regularidad y seguirá vinculado durante varios años más tras el contrato firmado en septiembre.

Outfielders ****

Tal como se preveía hace unos años, los Miami Marlins cuentan con una de las mejores unidades en el OF de toda la MLB y sólo con pensar que Stanton es el más veterano con 26 años, supone la envidia de la competición. Sin embargo, el techo podría ser bastante más alto y hay margen de mejora, porque son así de talentosos. Yelich se ha convertido en un extraordinario LF y aspira a ser el mejor de toda la liga con una prodigiosa combinación ataque-defensa, a la que va unida la velocidad. Una de las estrellas del momento, a lo que también puede aspirar Ozuna, que patrulla el CF y cuya temporada se vio lastrada por una decepcionante segunda mitad. No obstante, una mayor regularidad sería del agrado de la gerencia. Stanton es el rostro de la franquicia, pero sólo ha superado una vez los 125 partidos desde 2011. Si evita la clásica lesión, sus números serán de escándalo, pero eso tiene que producirse en algún momento o eso se espera.

Banquillo **

El japonés Ichiro Suzki debió encontrar la Fuente de la Eterna Juventud o es difícil de encontrar una explicación, aunque nos decantamos por pensar que el que tuvo, retuvo. Los jugadores normales no suelen tener su mejor campaña en cinco temporadas y mucho menos hacerlo a los 42, pero es lo que sucedió con Ichiro, que volvió a ser tremendamente polivalente al poder actuar en las tres posiciones en el OF y convertirse en el 30º hombre en llegar a los 3000 hits. Sigue vinculado una campaña más y resulta delicioso verle rendir de esta manera. Obligado a actuar muy a menudo por la sanción de Gordon, Dietrich demostró ser un jugador muy capaz y que aspira a ganar turnos de bateo con regularidad, si los titulares se confían. Rojas es una de las opciones de banquillo para el diamante, pero su bate no está a la altura. Pérez suspira por un puesto entre los elegidos aunque el club valora otras opciones que se sabrán durante el spring training.

Rotación de pitchers ***

La muerte de José Fernández deja un hueco imposible de llenar en el alma de los Marlins, pero como siempre en la vida, hay que seguir adelante y el club apostó por la llegada vía agencia libre de Vólquez, que no viene de hacer su mejor año en los Royals. Sin embargo, se trata de un pitcher experimentado al que le vendrá bien jugar en un campo amplio y en la Liga Nacional con un pitcher como bateador en lugar de la Americana y su DH. Chen fue una notable decepción y se piensa que lo peor ya ha quedado atrás porque el compromiso fue inmenso por parte de la franquicia. Conley dio un paso adelante y tuvo una efectividad importante. Es el momento de subir al siguiente nivel. Por su parte, Koehler se aproximó a las 200 entradas y se perfila como el clásico pitcher que es capaz de asumir un gran volumen de trabajo, pero sin mucho lucimiento. Straily es una interesante apuesta y brilló en el siempre exigente campo de Cincinnati. Puede ser una sorpresa.

Bullpen ****

Si hay un área en la que los Marlins brillan con intensidad es en su bullpen, pese a que los intentos por hacerse con Chapman o Jansen no tuviesen éxito. Lo más curioso es que el club contaba con un notable cerrador en Ramos, pero la idea de construir un bullpen dominante tampoco es mala. En ese sentido, la franquicia ha hecho un gran esfuerzo y ha logrado los fichajes de los ex-Red Sox Ziegler y Tazawa en la agencia libre, para conformar una unidad que no deje escapar los triunfos en los últimos compases de los encuentros. Al final del camino se encuentra A.J. Ramos, que viene haciendo un gran trabajo en los últimos años y como closer en campañas sucesivas. Barraclough, Phelps y McGowan completan un grupo excelente.

Altas y bajas ***

Superando la adversidad

Con José Fernández en sus filas, los Marlins podían soñar casi con cualquier cosa. Su fallecimiento dejó un vacío inmenso e imposible de rellenar, porque no había nadie en el mercado con sus características ni tampoco con su carisma. Aún así, el esfuerzo fue notable y se produjeron varias adquisiciones para la rotación en Vólquez y vía traspaso por Straily. Asimismo, el intento de construir un súper bullpen con Chapman o Jansen no funcionó, pero las llegadas de Ziegler y Tazawa vendrán a suplir las carencias que ya no puede contar con su número uno cada cinco días.

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