Europa reta desde hoy a Inglaterra en el nuevo 6 Naciones
El torneo se moderniza con los puntos bonus. Irlanda, la aspirante. El clásico Inglaterra-Francia será la atracción en el inicio del torneo.
Acostumbra Inglaterra a ser el enemigo a batir en prácticamente cada edición del tradicional 6 Naciones, el torneo de rugby más venerado del planeta. Quizá no sea el de más calidad (si se compara con el Hemisferio Sur), pero la atmósfera que envuelve a la vieja competición europea es mágica y nada se le puede igualar. Por estas fechas, cada año, los países de las Islas Británicas se retan con Francia, vecino del otro lado del Canal de la Mancha, y desde el 2000 también con Italia. El XV de la Rosa es el epicentro y todos quieren batirle, ya sea por motivos deportivos o heredados de conflictos bélicos pasados.
Sólo Inglaterra firmó un pleno en 2016. Ganó todos sus partidos. Ni siquiera los All Blacks (que cedieron con Irlanda en Chicago). Eso le convierte, amén de por los méritos adquiridos por sus clubes cada fin de semana, en gran favorito y aspirante. El Trébol firmó un mal 6 Naciones en 2016 pero luego venció a Sudáfrica, Nueva Zelanda y Australia, algo que no pasaba desde la Inglaterra campeona del mundo en 2003. Ambas se medirán en Dublín cerrando la última jornada.
Fácil es apuntar a Francia, que sigue en pleno proceso de renovación y que trata de innovar a marchas forzadas: la presencia de Serin como medio melé en el debut en Twickenham ante Inglaterra es toda una declaración de intenciones. Con todo, está lejos de su nivel. De Gales se espera mucho. Howley controla al equipo este año (Gatland anda ocupado con los British & Irish Lions) y tratará de lograr el título, como en 2013. Escocia ha crecido mucho y puede animar el torneo mientras que Italia ha encomendado a Conor O’Shea que arranque la nave azzurra, algo que no hizo Brunel.
Se resistía el 6 Naciones a adoptar el sistema de puntuación con bonus (en este caso, ofensivo por 4 ensayos y defensivo por perder por 7 puntos o menos). Lo tienen todas las competiciones y también el Mundial... sólo faltaba el 6 Naciones. Con él se espera decir adiós a tanteos cortos y planteamientos resultadistas. En caso de empate a victorias (se da en muchas ocasiones), la balanza puede decantarse por un buen ataque gracias al bonus.
Le Crunch. El 6 Naciones arranca y lo hace, en su primera jornada, con un duelo estelar: Le Crunch. El clásico Inglaterra-Francia promete emociones fuertes. Antes Irlanda debe mostrar credenciales ante la emergente y atractiva Escocia.