España arranca ante Islandia la toma del Mundial de Francia
Los Hispanos tienen hoy un complicado estreno ante Islandia (20:45, TDP). Palmarsson, el eje del juego islandés, se pierde el torneo.
Todos están de acuerdo, y no sólo los protagonistas directos: el debut es esencial, porque marca el devenir del Campeonato. Es decir, que el partido de esta noche ante Islandia tiene un peso importante. “Los nórdicos son un buen equipo, con mucho talento, que está jugando bien, y aunque la baja de Palmarsson (el central del Veszprem, con una lesión en una mano, regresó ayer a casa) es notable, no creo que sea definitiva”, asegura Jordi Ribera, que sabe que su rival es uno de los equipos que más corren, y que el veterano extremo Sigurdsson (1979) sigue siendo letal en los saques de centro.
Islandia, un país de 300.000 habitantes, con 6.000 licencias, tiene en el balonmano su deporte rey, aunque la Eurocopa de Francia también encumbró a su fútbol. Pero en este deporte han sido subcampeones olímpicos en 2008 a costa de España, con la que tiene un balance de 12 victorias y dos empates en 46 encuentros (32 triunfos españoles).
También España se presenta con uno de sus hombres fundamentales en la grada, aunque Jordi Ribera espera “recuperarle a lo largo del campeonato”. “He tenido la suerte de confeccionar la Selección que quería, porque no he dejado a nadie fuera por lesión; el único contratiempo es lo de Raúl Entrerríos”, apunta Ribera, que hoy dará la alternativa en la élite a Goñi, Ángel Fernández, Costoya, Balaguer y Figueras.
Disfrutar. Para el seleccionador es importante “que España juegue alegre, que disfrute en la pista. Los aspectos básicos son agresividad en defensa, orden, velocidad y aprovechar el contragolpe”. Y eso le inculca a los Hispanos, y por eso pretende que se instale en el grupo la necesidad de defender: “Deben tener esa mentalidad, para hacer el menor número de cambios de defensa y ataque, porque en el balonmano actual los equipos te penalizan”.
Por eso pretende que Joan Cañellas (“un fenóneno polivalente”) y Goñi (“ya lo hace en su equipo francés”) defiendan en el centro, “aunque para acabar los partidos es posible que estén Viran Morros y Gedeón Guardiola juntos, como en los últimos años”.
Juego colectivo. “Como no tenemos una gran estrella que desequilibre, apostamos por el juego colectivo, y eso implica tener a todos los jugadores preparados y con protagonismo en cada partido. No podemos perder jugadores en el banquillo”, apunta Ribera.
En este Mundial se volverá a contar con la ayuda tecnológica, que en este caso correrá a cargo de la alemana Brodcast Solutions, la misma empresa que utiliza la FIFA. Le cuesta a la organización 160.000 euros, y asegura ocho cámaras extras para que los árbitros revisen situaciones dudosas.