Ronda Rousey quiere volver a ser la reina del UFC
Ronda Rousey regresa al octógono tras 13 meses. Enfrente, la campeona, Amanda Nunes, que llega tras exhibirse en sus dos últimos combates. En juego el campeonato del peso pluma UFC.
Trece meses han pasado desde que Ronda Rousey se subió por última vez al octógono. Holly Holm no sólo de acabó con el reinado de la campeona, lo hizo añicos. Rousey, principal rostro de la UFC junto con Conor McGregor, desapareció de la competición. Tras varias operaciones y 'cameos' en Hollywood, se anunció su regreso, pero 'Rowdy' no era la misma. Se ausentó de todos los actos previos, todo el mundo se preguntaba por su paradero, a la excampeona no le había gustado como se repetía una y otra vez su KO, y prefirió centrarse en entrenar.
A tal punto llegó su mutismo que se rumoreó que no se presentaría al pesaje público. Error. Ronda apareció, pero volvió a dejar claro que éste no es un combate más. Fuera de provocaciones y bravuconadas, Ronda se subió a la báscula, cumplió con las 135 libras (61,2 kilogramos), posó para las fotos, se dio la vuelta y se fue con rapidez. No quería la presión de los focos.
Antes de ese protocolario pesaje, Rousey rompió su silencio. Lo hizo por dos medios. Primero habló en unas breves declaraciones al canal oficial de la UFC, allí dejó claro como afronta el combate. "No me importa nada más que ganar esta pelea y por eso no gasto ni un gramo de energía en nada más", aseveró.
Después publicó una foto en su Instagram, allí demostró que aunque haya hablado muy poco de su preparación ha sido la mejor de su carrera. Rousey comparó dos fotografías, la primera días antes de su combate contra Cat Zingano, pelea en la que alcanzó su mejor nivel. A la derecha, una actual, a cinco días de la pelea, dónde se ve un cuerpo más musculado. Ronda Rousey está lista, quiere de nuevo su cetro.
Ronda Rousey parte como favorita en las apuestas ante Amanda Nunes
Por su parte, Nunes también es una experta en la especialidad, lo que complicaría mucho la pelea a Rousey si se llegase a ese extremo. La brasileña llega en el mejor momento de su carrera. Destrozó a las dos últimas luchadoras que lograron derrotar a Holly Holm, sobre todo a Miesha Tate, quién se rindió el pasado julio en menos de dos minutos. Además, Nunes es una de las mejores peleando de pie.
Nunes es la campeona del peso gallo y no por casualidad, y Rousey no tendrá un paseo triunfal. La estadounidense debe demostrar si su retiro de la primera plana informativa le ha servido para corregir sus errores. 'Rowdy' volvería a sufrir si busca el intercambio de golpes, como hizo contra Holm. Mientras, Nunes buscará no llevar la pelea al suelo. Su mayor envergadura y pericia como 'kickboxer' pueden decantar el combate a su favor. Dos estilos frente a frente. Las dos mejores peleadoras del momento con un único objetivo, ser la reina de la UFC.
Así quiso intimidar Nunes a Ronda Rousey antes del combate.