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NATACION

"Los padres de los nadadores te dicen que hace falta un cambio"

Miguel Ortiz-Cañavate, padre de dos hermanos nadadores, es la alternativa a Fernando Carpena en la presidencia de la RFEN. Las elecciones, el día 26.

BarcelonaActualizado a
Ortiz-Cañavate y Rafael Blanco.

Cansado de ver los toros desde la barrera, Miguel Ortiz-Cañavate ha dado un paso al frente y el día 26 de noviembre será uno de los dos candidatos a la presidencia de la RFEN. Empresario de éxito, ha recorrido medio mundo y quiere "internacionalizar" la natación, deporte que, según su parecer, está muy por debajo de su nivel por culpa de la gestión del que será su oponente, Fernando Carpena. Para ganar más fuerza se ha unido con Rafael Blanco, expresidente.

¿Por qué se ha decidido a dar el paso y presentarse a las elecciones de la RFEN?

Después de tantos años ligado a la natación, me he decidido. Todo es mejorable. Tengo ilusión, tiempo, estoy convencido, y sobre todo, tengo la capacidad y las armas externas para conseguir objetivos grandes.

Habla de que todo es mejorable. Concrete.

Creo que la natación es una debacle. Los resultados están ahí: son mediocres y pésimos. Tengo mucho por hacer y puedo organizar algo importante. Mi objetivo es que España esté entre las cinco del mundo en todas las disciplinas. Somos un país de deportistas, con instalaciones, hay gente aficionada al deporte y no se entiende que triunfemos en todos los deportes menos en la natación, salvo casos aislados.

¿Qué males percibe en los deportes acuáticos?

El principal mal que veo es la falta de integración y de unión en los esfuerzos. Lo veo en los entrenadores, deportistas y clubes… Es un reino de taifas porque se ha perdido la ilusión. Hay gente que no irá a votar. No hay una planificación conjunta y no se cuenta con todos. Luego hay otros detalles. Muchos deportistas lo dejan sin llegar a su forma óptima, y eso es que algo falla. Hay demasiados abandonos.

¿Considera que solo los mejores o los que tienen opciones de medalla están atendidos?

Hay una interrupción, y eso ha hecho que se interesen solo por los mejores. O sale un fuera de serie o ya no se le atiende. Está el caso de Carlos Peralta, un nadador que va a sacarse la carrera de Medicina y que lo dejan sin Mundial de piscina corta cambiando unos criterios a última hora. No hay una planificación correcta a medio y largo plazo. No se cuida al nadador. Tampoco se cuida muy bien a los que están en la elite. Está el ejemplo de Rafa Muñoz. Vi el trato que recibió todos estos años.

¿Considera que la natación se gestiona sin un plan?

Sí, a salto de mata. Se improvisa. La RFEN debería estar más cerca. Si no fuera por un Serafín Calvo que saca a César Castro o Fátima Gallardo, no saldrían nadadores. Y a este técnico, por ejemplo, nadie le ha visitado. Luego está Eduardo Solaeche, magnífico nadador: nunca nadie fue a hablar con él a Estados Unidos. Hay que darles una palmadita en la espalda de vez en cuando. Hay un desinterés…

¿Al margen de la natación considera que los otros deportes de la Federación tampoco avanzan?

Han empeorado todos en los cuatro últimos años. La sincronizada llegó a niveles altísimos, pero cometió un error gravísimo Carpena con Tarrés, y eso le costó 433.000 euros. En sincro siguen creciendo las practicantes, pero los resultados son peores. Hasta Anna Tarrés nos gana. Es obvio, hablas con padres de nadadores y te dicen que hace falta un cambio absoluto. Los resultados en waterpolo están ahí, a pesar de los esfuerzos de clubes, como el Barceloneta o el CN Sabadell. Eso se ha desbaratado. No hay un contacto directo y diario con los clubes. Parece que estemos resurgiendo algo en waterpolo, con los júniors que han conseguido éxitos.

Carpena lleva ocho años en el cargo. ¿Considera que debe haber una limitación de mandatos?

Es un asunto democrático. Creo que sí que debe haberla. Ocho años como máximo. Yo estoy preparando todo en base a ocho años. Todos los cambios requieren de un tiempo. Tuve objetivos más complicados en mi vida y los superé. No me interesa el sillón, sino conseguir que todo funcione, como he hecho con mis empresas.

¿Qué apoyos tiene y cómo será su equipo en caso de ganar?

Parece que tiene que haber represalias. Hay recelo o preocupación entre la natación. Muchos de los que me apoyan o estarán en mi equipo prefieren no dar la cara. Presenté la carta de dos personas, como son Sergi López y Mike Bottom, que me apoyan. Cuento con los profesionales que ya están, porque creo en el ser humano y a veces orientándoles se consiguen objetivos que no se lograban bajo esta presidencia actual. Nunca entré como un elefante en una cacharrería. Pero hay aspectos que no se entienden. Me parece demencial que vayan cuatro nadadores al Mundial de piscina corta. Quiero fomentar la internacionalización. Hay que estar más presentes en más sitios, que haya clínics, y que la gente se acostumbre a ir por el mundo.

¿En estas elecciones está el todo el pescado vendido?

Está bastante vendido. Hay personas que trabajan para ciertos objetivos, y Carpena ha estado cuatro años ganando adeptos para una renovación. Ha estado trabajando en programas e ideas, y ha dejado de lado que todo funcione y que la gente esté contenta. Lo ha hecho muy bien. Hay personas que me dan la razón, pero luego me dicen que votarán a Carpena. O me dicen que votarán a Carpena sin ver su programa. Yo me pagó todo. Tengo un convencimiento de creer en las personas, me formé bajo el humanismo y existe una ética, y se debería votar en consecuencia, aunque tu amigo sea una persona o la otra. El aire fresco conviene: tengo patrocinios y moveré esta historia. Seremos dinámicos, y pasito a pasito lo lograremos. Yo me veo con, pese a todo esto que he explicado, con grandes posibilidades de ganar.

¿Cuáles son sus méritos empresariales?

He entrado en empresas en suspensión de pagos y las he puesto en beneficios, como el Casino de San Sebastián. Al tercer año ya repartía dividendos. Salvamos también el hipódromo de San Sebastián gracias a ideas, proyectos y patrocinios. En Japón llevé delegaciones y representaciones institucionales de muchas comunidades. ¡Les he vendido mesas de mezclas de música fabricadas en Leganés a los japoneses! Tengo seguridad, conozco cosas, he abierto empresas en todos los continentes. Pondré mi experiencia y mi bagaje, y estoy dispuesto si hace falta a poner un millón y medio de aval para pagar los platos rotos.