Cardenal deja la secretaría de Estado para el Deporte
Comunicó a Méndez de Vigo, que no había decidido todavía si le ratificaba, su decisión de "dejar paso". El desgaste por los conflictos con Villar y Blanco, clave.
Miguel Cardenal anunció este martes su renuncia a continuar como secretario de Estado para el Deporte después del acto de firma de un convenio con el Comité Paralímpico. El desgaste de la guerra con Ángel María Villar, presidente de la Federación Española de Fútbol, y Alejandro Blanco, presidente del Comité Olímpico Español, ha sido decisivo.
"He encontrado poca resistencia. Menos el tenis y el fútbol, que recibieron el amparo de Alejandro Blanco, el resto han ayudado. Las querellas me han costado un desgaste personal importante, pero hemos garantizado el rigor en el cumplimiento de la ley", reconoció. Las dos interpuetas contra él, por Villar y José Luis Escañuela, se han desestimado.
Precisamente, tras conocer que el juez había archivado la querella de José Luis Escañuela, el expresidente de la Federación de Tenis inhabilitado por el TAD, Cardenal habló con Iñigo Méndez de Vigo, ratificado por Mariano Rajoy como ministro de Educación, Cultura y Deporte, para comunicarle su decisión "de dejar paso". "Lo entendió muy bien", explicó el bilbaino, que recordó que igual que impulsó limitación de mandatos en algunas federaciones, como la de Tenis, "no sería coherente alargar el mandato tanto tiempo".
"Valoré la opción de continuar una parte de la legislatura para acabar cosas como el desarrollo del Real Decreto de derechos de televisión y tenía ilusión por trabajar en un entorno económico distinto. Pero hay que tomar decisiones de urgencia, como la reforma necesaria del Plan ADO, y es justo que quien venga no se vea condicionado durante los cuatro años", apuntó.
No estaba, en cualquier caso, claro que Méndez de Vigo fuera a contar con él. "Aquí hay una tremenda exposición y es buena la renovación. La idea de dejarlo me rondaba desde hace meses", reconoció Cardenal, que llegó al cargo con José Ignacio Wert y fue mantenido por Méndez de Vigo. Ahora, se incorporará como profesor a la Universidad Rey Juan Carlos (es doctor y catedrático de Derecho del Trabajo) y descartó (el régimen de incompatibilidad lo impide durante dos años) seguir ligado al deporte.
Villar y Blanco, que habían intentado 'puentear' repetidamente a Cardenal a través de Méndez de Vigo, verán previsiblemente cómo se rebaja ahora la tensión. No se espera una nueva designación hasta al menos el Consejo de Ministros del día 18. Y se deslizan nombres como los de las exdeportistas Miriam Blasco, Theresa Zabell y Carlota Castrejana, y políticos como Xavier García Albiol, Pablo Salazar, José Ramón Lete o Manuel Cobo.
El gran éxito de Cardenal ha sido el saneamiento del fútbol. "Ha cambiado radicalmente y está saneado. Todo acompañado por medidas solidarias con el resto de deportes a los que, a través del nuevo Real Decreto de reparto televisivo, les llega el 1% para la Seguridad Social de los deportistas", recordó. Su alianza con la LaLiga de Javier Tebas fue fundamental. También destacó la mejora en la gobernanza de las federaciones, muchas sometidas a planes de viabilidad, "sin que se resintiera el rendimiento del deporte federado porque la calidad de las medallas en Londres han sido mejores". "Ahora se es extraordinariamente riguroso con el control del dinero público", dijo.
En su debe, la modificación de la Ley Antidopaje (que se llevará inmediatamente al Consejo de Ministros) para adecuarla al Código AMA y que mantiene a la Agencia española suspendida y las tensiones con Villar y Blanco. "No ha habido guerra con nadie, así que ni la gano ni la pierdo", valoró conciliador en su despedida del "trabajo más bonito que se pueda tener".