Portugal deja fuera de su Mundial a su mejor jugadora

Ana Catarina Nogueira (1978) llegó al pádel procedente del tenis, una de las contadas jugadoras portuguesas que disputaba los circuitos internacionales. Un día se cansó de viajar y abandonó el tenis, y como muchas españolas y argentinas se readaptó al pádel primero por el placer de jugar, y luego para competir. De hecho, desde 2010 domina la competición nacional: "He ganando cinco de los últimos seis campeonatos; y nunca perdí un set, porque el año que no gané, en 2015, fue únicamente porque no jugué".

Lleva tres años disputando el WPT, y entre las jugadoras ha llamado la atención de que esté excluida del Mundial: "No ha sido una decisión mía, porque yo siempre jugaré por mi país, sino que la Federación no me ha convocado. Antes, cuando el pádel estaba bajo la tutela de la Federación de Tenis, jugué el Mundial de 2014 y quedamos terceras, y el Europeo de 2015 en que quedé campeona, aunque es cierto que no participaron las españolas".

En el Circuito le llaman Portu "porque soy la única portuguesa entre españolas y argentinas", y para ella representa un esfuerzo tremendo la competición porque reside en Oporto y se tiene que desplazar cada dos semanas a los torneos del WPT. "He jugado y me he entrenado en el circuito catalán, y en ocasiones viajó a España para hacer entrenamientos", asegura por teléfono esta jugadora de 1,72 metros que juega en el revés.

Dice que no ve en su país "jugadoras que quieran dar el paso e intervenir en el WPT porque es una apuesta ruinosa si no tienes patrocinadores que te ayuden; económicamente el esfuerzo es brutal", comenta ella que dirige un club en el que es entrenadora y socia en Matosinhos, "con seis pistas", porque prefiere el "pádel al tenis", porque le gusta más y porque del tenis acabó "saturada de tanto viaje todas las semanas por medio mundo". De momento, Ana tiene tres patrocinadores que le ayudan, y terminará la temporada con Esther Lasheras, con quien ha disputado los dos últimos torneos.