Los Dolphins corren con Ajayi por encima de los Bills
Una inconmensurable línea ofensiva del equipo de Miami se merienda a la defensa contra la carrera de los de Buffalo en una muy merecida victoria.
Esta temporada estamos teniendo la suerte de asistir al nacimiento de potenciales estrellas con los rookies de esta clase. Está siendo casi instantáneo y en multitud de casos. Los Elliot, Wentz, Bosa, Prescott, Stanley o Conklin han sido bien glosados. Y con razón. No todos los años, ni mucho menos, tenemos esta explosión de talento. Pues bien, tras la victoria de los Miami Dolphins por 28 a 25 sobre los Buffalo Bills de hoy, es justo que añadamos un nuevo nombre: Laremy Tunsil.
La parte izquierda de la línea ofensiva de los Dolphins y, más concretamente, el citado Tunsil como left guard junto al center Pouncey, ejercieron un dominio tan incontestable sobre la defensa de los Bills que en Buffalo tardarán en olvidar tal exhibición.
Su trabajo fue el mayor culpable de que Jay Ajayi consiguiera la alucinante cantidad de 219 yardas en tan sólo 29 carreras. El corredor ha pasado por segunda semana de 200 yardas y, desde luego, no le quito un ápice de mérito, que el logro es descomunal, pero la ayuda de sus compañeros de la línea se ha demostrado tan esencial que los honores han de ser compartidos.
Tras ese juego de carrera, Buffalo quedó completamente desarbolado. Es cierto que el resultado muestra igualdad, de la misma forma que durante gran parte del partido el marcador vio por delante a los Bills, pero no deja de ser un trampantojo.
Porque resulta que los puntos de los Buffalo partieron de dos grandes jugadas en equipos especiales, algo que les dio una posición de campo ventajosa y 10 puntos, y de un pase gigantesco de 62 yardas de Tyrod Taylor a Marquis Goodwin de 62 yardas. Aunque ponía el 16 a 6 en el marcador, era un espejismo, un accidente.
Y es que, además de dominar claramente las trincheras en ataque, los Dolphins también lo hacían en defensa. Es cierto que LeSean McCoy estaba claramente disminuido por su lesión, pero no dejas a una estrella en 11 yardas terrestre sino tapas todos los agujeros. Suh y Mario Williams completaron, muy probablemente, el mejor partido de la temporada, y obligaron a los Bills a vivir de chispazos.
Poco a poco, los Dolphins fueron remontando y, tras ponerse por delante, Ryan Tannehill conectó en un pase de 66 yardas a Kenny Stills que les ponía dos anotaciones por delante. Fue un momento clave, ya en las postrimerias del último cuarto, porque era un tercer down, y largo, en el que, de ser parados, tendrían que devolver el balón a los Bills con opciones de ganar el partido.
Las trincheras han sido claves en esta victoria y, contra lo que podría esperarse, fueron las de Miami las que triunfaron. Y no fue por poco, como muestra el marcador, sino por un abundante margen.