Los veteranos del Barcelona resuelven ante el Vezsprem

Otro escollo superado por el Barcelona, que mantiene su condición de invicto ante un Veszprem que pierde su primer encuentro en la Champions (26-23), en un choque más emocionante que de calidad por parte de ambos conjuntos, y en el que los porteros tuvieron su importancia: Pérez de Vargas, la hora completa; Mikler, en la segunda mitad para los visitantes.

La baja de Nagy, que no estuvo en la convocatoria, marcó el encuentro por muchas razones: lo que impone en defensa, y lo que aporta en ataque, porque entre sus dos relevos, Ancsin y Kopljar, sólo sumaron dos tantos. Mala cosa para una primera linea con esa aportación.

Y por parte azulgrana, como este era un partido grande, nada de experimentos: los veteranos a sacar el partido adelante. De hecho, encarriló el encuentro desde los nueve metros, con Lazarov y Jallouz golpeando con relativa facilidad, y cuando hubo problemas, balones a Víctor Tomás para que acabase las jugadas. Andersson prácticamente quedó inédito, y Mem tuvo una presencia testimonial.

Más importante fue Pérez de Vargas, que desequilibró el choque en la primera mitad, con una aportación de aciertos de más de un cincuenta por ciento, y de ahí ese 16-11 al descanso; luego, con Mikler salvado acciones de uno contra uno, el Veszprem apretó el partido, ayudado por las precipitaciones barcelonistas, con excesivas pérdidas de balón. Sin embargo, tampoco los húngaros se iban a aprovechar de los regalos, ya que al final fueron tan generosos como los barcelonistas, que con esta victoria mantienen el liderato del grupo, a la esperar de jugar en París ante el PSG.