Un despliegue de pitcheo pone a los Indians en la Serie Mundial

El pitcheo es el nombre del juego. Y aparentemente Cleveland es su apellido.

Ryan Merritt y tres relevistas se combinaron para limitar a la otrora potente ofensiva de Toronto en seis imparables, Coco Crisp y el dominicano Carlos Santana tronaron sendos cuadrangulares y los Cleveland Indians vuelven a la Serie Mundial por primera vez desde 1997 al derrotar 3-0 a los Blue Jays, que sufrieron de dos blanqueadas y fueron limitados a tan solo ocho carreras en los cinco juegos de la Serie de Campeonato de la Liga Americana.

La próxima vez que el mexicano Marco Estrada salga a un campo de batalla, tal vez deba escoger mejores compañeros, pues queda claro que estos no le brindan apoyo alguno. El mexicano se quedó con su segundo revés de la serie pese a lanzar seis innings en los que permitió cinco imparables, tres carreras, dos limpias, y siete ponches. Pero en sus 15 entradas de trabajo ante Cleveland la ofensiva de Toronto lo respaldó con exactamente cero carreras.

Los Blue Jays debían saber desde antes que es imposible ganar sin anotar, a fin de cuentas eso mismo les sucedió el año anterior, cuando cayeron eliminados en la misma instancia ante los Kansas City Royals, que limitaron a la ofensiva de Toronto en tres carreras o menos en sus cuatro victorias, incluyendo, por supuesto, una blanqueada.

Los Indians infligieron todo el daño necesario en el mismo primer episodio. Con dos outs, el puertorriqueño Francisco Lindor pegó un flojo sencillo y Mike Napoli le siguió con doblete contra la barda del jardín derecho para mover los cartones.

Eso fue todo lo que necesitó el novato Merritt, quien con tan solo cuatro juegos de experiencia en Grandes Ligas, y una sola apertura, se fajó en casa ajena para trabajar cuatro entradas y un tercio, en las que apenas permitió dos imparables y nunca estuvo en verdadero peligro.

Terry Francona volvió a ganar el duelo desde la trinchera. Merritt hizo apenas lo justo y aunque no se acreditó la victoria, llevó el encuentro al terreno en donde los Indians se sentían más cómodos. Con Bryan Shaw, Andrew Miller y Cody Allen bajando el telón en patio ajeno, un Rogers Centre que se desinfló con cada inofensivo batazo de lo que llegara a ser una potente ofensiva.

Shaw se quedó con la victoria al permitir dos hits en una entrada de labor. Andrew Miller se mantuvo intratable con dos innings y dos tercios en blanco y Cody Allen se quedó con el rescate.

"Believeland" está a cuatro triunfos de entregarle a la ciudad su segundo título del año, aunado a los Cavaliers de la NBA, luego de que Cleveland no tuviera un solo cetro desde 1955.