NewslettersRegístrateAPP
españaESPAÑAchileCHILEcolombiaCOLOMBIAusaUSAméxicoMÉXICOusa latinoUSA LATINOaméricaAMÉRICA

Lions 24 - Eagles 23

El primer error de novato de Wentz condena a los Eagles

El quarterback de Philadelphia jugó un partido fantástico ante los Detroit Lions, pero lo tiró por la borda en una decisión de joven inconsciente.

DETROIT, MI - OCTOBER 09: Carson Wentz #11 of the Philadelphia Eagles on the field prior to the start of the game against the Detroit Lions at Ford Field on October 9, 2016 in Detroit, Michigan.   Leon Halip/Getty Images/AFP
 == FOR NEWSPAPERS, INTERNET, TELCOS & TELEVISION USE ONLY ==
Leon HalipAFP

Por muy bueno que seas, hay un proceso necesario para convertirte en lo que estás llamado a ser. Se llama tiempo. Y requiere tanto de aciertos como de errores para aprender de ambos y acumular experiencias que te hagan mejor. Carson Wentz había jugado hasta ahora tres partidos casi perfectos en la NFL. Corrijo, cuatro. Cuatro menos una jugada. Pero es que esa jugada fue la clave entre una opción de victoria y la derrota.

A falta de 1:28 para concluir el encuentro, los Philadelphia Eagles perdían por 24 a 23. No les quedaban tiempos muertos y comenzaban el drive de la verdad en su yarda 25. Los Detroit Lions, sus rivales, no habían podido poner el partido en franquicia en su último ataque, anotando un touch down, pero sí en ponerse por delante con un field goal.

Sin embargo, a un buen ataque de la NFL dejarle 1:28 con tan sólo el objetivo de llegar a field goal range es darle un caramelo. Y el ataque de los Eagles es un buen ataque. Sobre todo por Wentz. Algo que se pudo ver toda la tarde.

Pero, aún así, habían estado presionados a menudo. La defensa de los Lions se comportó con altura y peleó con agallas y tensión aún con la falta de su mejor hombre, Ziggy Ansah. Eso mismo sucedió en el down decisivo: la línea defensiva de los Lions saturó el pocket. Y Wentz, crecido, lanzado, se movió bien, con aplomo, miró al frente y lanzó una bomba gigantesca en toda la profundidad de la secundaria de Detroit. Allí esperaba Nelson Agholor, pero también Darius Sly. El cornerback de los Lions tuvo una oportunidad de interceptar y no la desaprovechó. Fin del partido.

¿Por qué Wentz se la jugó tanto? Porque es un chaval, porque se creía invencible, porque está aprendiendo. No se trata tanto de la ejecución como de la decisión. Aún tenía otros tres downs y el objetivo no era el touch down sino llegar a la yarda 35. No había ninguna necesidad de correr ese riesgo. Pero es lo que toca cuando llevas cuatro partidos como titular en esta liga.

Concluyó, así, su racha de 134 pases de inicio de carrera sin lanzar una intercecpión, sólo superado por Tom Brady y veremos si por Dak Prescott, que también tiene a tiro la cifra. De la misma forma que concluyó, en el drive anterior, la racha de los Eagles de no perder el balón, pues Ryan Matthews había cometido un fumble asesino que llevó a los Lions al field goal, a la postre ganador. Huelga decir que todo ello llevó al fin de la imbatibilidad de los Eagles, que se ponen 3-1 de récord.

Pero eso no ha de deslucir un trabajo duro y admirable del equipo. Teniendo todo en contra de inicio, con un 14-0 para empezar el encuentro, pelearon río arriba con todo lo que tuvieron. Primero con una línea defensiva que se fue comiendo a la OL de los Lions, y luego con un Wentz tremendo, fantástico. Sólo falló 8 pases de los 33 que intentó y conectó dos veces en la end zone con Ryan Matthews y Josh Huff. Pero, sobre todo, en una serie de drives muy bien dirigidos, equilibrados, que acabaron en field goal.

Sin embargo, sería injusto dejar de nombrar que los Lions fueron capaces de pelear en cada parcela del terreno. Sobre todo con su defensa, que no le perdió la cara al partido, y con Theo Riddick, cuyos números, 49 yardas de carrera y 33 de recepción, no hacen justicia a la dureza con la que jugó. Valga de ejemplo un cuarta y una que Detroit se jugó y en el que fue placado hasta tres veces tras la línea de scrimage... pero en el que rehusó irse al suelo hasta tener el primer down en el bolsillo.

No fue un gran partido de Stafford. El sistema de su coordinador ofensivo, Jim Bob Cooter, le hace buscar a diferentes receptores, algo que cumplió, y es cierto que dio tres pases de touch down, pero no es menos cierto que sus drives fueron a trancas y barrancas y en la segunda mitad no hubo forma de arrancar el motor ofensivo en ningún momento.

Para colmo de males, cometió un fumble en su propia yarda 16 que pudo ser mortal para el equipo, aunque se quedó en nada. En parte, por las penalizaciones de los Philadelphia Eagles, numerosas, nada menos que 14, y muchas de ellas evitables.

Sea como fuere, los Lions se acabaron llevando una victoria que les pone con 2-3 en la temporada, y en la que el único error serio del rookie Carson Wentz en lo que va de temporada tuvo un papel determinante.

CONSULTA TODAS LAS ESTADÍSTICAS DEL PARTIDO AQUÍ.