Los números no cuadran en las Grandes Ligas de béisbol
Después de medio año jugando casi a diario sólo cinco equipos de cada liga se han clasificado para jugar los playoff, mientras el resto están ya de vacaciones.
La liga regular se ha acabado. Han sido seis meses de intenso trabajo por parte de los jugadores y de todo el estamento técnico de cada equipo. Partidos casi todos los días, entrenamientos, viajes eternos, lesiones, alegrías, decepciones… ha habido de todo, como siempre, para poder establecer al final una clasificación en base a los 162 partidos jugados por cada equipo. “Oiga, espere… ¿162? ¿Seguro? No me cuadran las cuentas”.
La última semana de competición ha sido realmente caótica, tanto que a la MLB le empezaban a caer gotas de sudor pensando en los posibles desempates y partidos aplazados que iban a tener que jugarse. Al final y para alivio de los dirigentes de la Liga los resultados jugaron a su favor y el domingo quedaron establecidos los equipos que jugarán en octubre sin tener que modificar el calendario ya establecido. Eso sí, cualquier nuevo aficionado que le eche un vistazo a la clasificación verá que no todos los equipos han jugado los 162 partidos reglamentarios. Tranquilos, es normal, la competición no ha sido adulterada.
El descuadre de partidos se inició con el fatídico accidente que acabó con la vida del lanzador cubano José Fernández el pasado día 25 de septiembre. Los Marlins y los Braves decidieron, con buen criterio, suspender el encuentro que debían jugar ese día y en el que se había previsto que, curiosamente, Fernández jugara como titular, hasta que el día anterior los técnicos decidieron posponer para el lunes su partido, con la idea de darle así un día más de descanso y que se enfrentara a unos New York Mets con los que aún competían por una plaza en octubre. Quizás esa decisión hizo que Fernández decidiera salir esa noche con los amigos, quizás lo hubiera hecho de todas formas pero se hubiera retirado antes, quizás… lo cierto es que eso nunca lo sabremos y tampoco debemos darle más vueltas a este tipo de elucubraciones que no nos van a llevar a ninguna parte ni nos devolverán al grandísimo lanzador de Miami.
El hecho es que el encuentro no se jugó y quedó pendiente de disputarse en caso de que los Marlins estuvieran aún con opciones de clasificar para jugar en octubre. Algo parecido le ocurrió a los Tigers, aunque en este caso debido a unas caprichosas condiciones meteorológicas en Detroit que primero hicieron que se tuviera que acortar el encuentro del día 28 y que al día siguiente forzaron a la suspensión del que cerraba la serie frente a los Indians, con nueva fecha para el lunes 3 de octubre. El caso es que tanto los Marlins como los Tigers quedaron fuera de la lucha por los playoff y los partidos que quedaban pendientes de jugar se anularon al no tener ya ninguna trascendencia para la clasificación final.
Distinto fue el caso del encuentro de la liga nacional que enfrentó a Chicago contra Pittsburgh el día 29 y que tuvo que suspenderse con empate a 1 en el marcador en la parte alta de la sexta entrada. En teoría el encuentro debería de haberse reanudado en otra fecha al no haber un ganador del mismo, pero habida cuenta de que los Cubs ya habían sellado hace días su clasificación para octubre como el mejor equipo de toda la competición y que los Pirates matemáticamente estaban ya fuera de cualquier opción, la MLB decidió dar por concluido el encuentro con empate, algo que no sucedía desde junio de 2005. Las estadísticas del partido contarían para los registros pero el resultado no se vería reflejado en la clasificación, ya que esta no contempla la posibilidad de que un partido acabe en empate.
Así pues si miráis la clasificación final veréis que Miami Marlins, Atlanta Braves, Detroit Tigers, Cleveland Indians, Chicago Cubs y Pittsburgh Pirates han jugado sólo 161 partidos en vez de los 162 reglamentados. No pasa nada, la clasificación que figura en la página oficial de la Liga es la definitiva y ningún equipo ha salido perjudicado por estas decisiones, más bien todo lo contrario. ¿Alguien se imagina a unos Indians o unos Cubs teniendo que disputar ayer lunes un partido intrascendente, con todo lo que se juegan a partir de ahora? No hubiera tenido ningún sentido.
Y tras la liga regular llega la hora de los playoff, empezando con unos partidos de wildcard a vida o muerte. Olvidémonos ya de la clasificación de la liga regular, eso ya no vale para nada. ¡Lo mejor de la MLB empieza hoy mismo!