Beitia: "La vida me ha regalado esta segunda oportunidad"
La medallista de oro, agradecida: "Es el resultado de 26 años caminando, del trabajo de mucha gente que tengo detrás, que ha puesto su granito de arena para que esté aquí y pueda estar saltando".


Ruth Beitia se dio un homenaje en el Estadio Olímpico, dando una emocionante vuelta de honor, sonriendo hasta que recogió la medalla de oro en lo alto del podio y atendió a los medios desplazados a Río. No saltó más que nunca, pero sus 1,97 le valieron para lograr la mayor gloria a sus 37 años: el oro olímpico.
¿Cómo se siente después de convertirse en campeona olímpica?
No me lo creo. Es un sueño hecho realidad. Es el resultado de 26 años caminando, del trabajo de mucha gente que tengo detrás, que ha puesto su granito de arena para que esté aquí y pueda estar saltando.
Y eso que usted decidió en un momento dejarlo… ¡Lo que se hubiera perdido!
La vida me ha regalado esta segunda oportunidad. Hemos recogido los frutos de estos 26 años. No me olvido de Ramón Torralbo (su entrenador), yo soy la imagen, pero esto es al 50 por ciento de cada uno. Sigo siendo lo que soy gracias al deporte. Son valores que puedo extrapolar al resto de mi vida. Me quité todas las pesas de la mochila. Ahora solo disfruto y sonrío. Quiero además que todos disfruten conmigo.
¿Qué supone ser la primera mujer en ganar un oro en el atletismo español?
Seguimos haciendo historia.
¿Y lo de ser la más veterana?
Eso es anécdotico.
¿Cómo vivió su último salto y el de sus rivales?
Fueron momentos increíbles. Cuando saltó Demireva y falló pensé: 'se ha cumplido el sueño, soy medallista olímpica'. Luego tiró Vlasic y ya me vi plata. Y luego falló Lowe. La suerte estuvo de mi lado y esto es gracias al trabajo.
¿Qué rival le daba más miedo?
Salté la primera y eso era un arma de doble filo. Saltar el 1,97 a la primera fue fundamental. La más peligrosa era Lowe. Ella cerraba y tenía la oportunidad de dar la explosión. Ella se quedaba sin medalla sin no saltaba. Fue algo espectacular cuando falló.
¿Qué sensaciones tuvo durante la final?
Me voy con la sensación de que podía haber hecho una marca buena. Tuve la oportunidad de que en la grada había gente importante y gente que me ha aportado. Tuve el apoyo de mi equipo, mis compañeros y de la Federación.
¿Qué pensó al subir al podio?
Cuando subí al podio no se por qué no me han salido las lágrimas. Tengo ganas de echarlas, pensé en mi familia y en mi entrenador. Pensé en la gente que en los momentos malos estuvo siempre ahí.
¿A quién le dedicó el corazón que hizo cuando ganó?
El corazón fue para toda la gente que tengo en casa y para todos los compañeros de la Selección. Me siento orgullosa de capitanear.
-¿Cuál es el secreto?
El secreto era este. El motor que me mantenía con ganas de continuar era este sueño que hoy seguro se ha hecho realidad. Y tengo uno nuevo, que es que día a día la vida sume. Hay que vivir el momento. Me quedan dos citas de la Diamond League el 27 en París y el 1 en Zúrich y me voy con la sensación de que puedo hacer una gran marca.
¿Qué le ha dicho Blanca (por Vlasic)?
-Nada, no hemos hablado. Hubiese preferido que hubiese otra persona en el podio. No tenemos mucha relación.
-No es normal eso, ¿no?
-Últimamente llevamos un tiempo en el que el salto de altura goza de felicidad y estamos juntos, haciendo piña. Es un placer llevarme a grandes amigas.
-¿Ahora cuatro años de prórroga y a Tokio?
-No. Esto es el aquí, el ahora y este momento. No sé qué me deparará la vida con 41 años pero estar en unos Juegos seguro que no.
¿Qué le apetece hacer ahora?
-Quiero darle un abrazo a Ramón sin cámaras, sin gente. Y a la gente de atletismo. Y tomarme una cerveza. Hoy igual caen dos. Y necesito una ducha de urgencia.
-¿Es todo como imaginaba?
-El trabajo que he hecho con mi psicóloga, aparte de las visualizaciones, en cada uno de los saltos había un tiempo libre para pensar en lo que quisiese y en uno de ellos, de esos tiempos libres, me veía en el podio y escuchando el himno. Y como ponía un tuit que colgué ayer, a veces los sueños se hacen realidad. Quiero darle las gracias a mi familia que son mis mayores fans. Soy la quinta de cinco hermanos. Mi padre fue el primer olímpico como juez y siempre han estado muy pendientes de mí. A toda la gente que me ha apoyado desde Santander, de donde nunca he salido, le doy las gracias. Y a todos los que os habéis desplazado aquí.
-¿Se plantea el Mundial del año que viene?
-No tengo ni idea. No he preparado la temporada que viene. Me quiero ir de vacaciones pero vamos, el día 4 tengo que empezar a trabajar… pero las mejores vacaciones van a ser con mi gente. Pero Santander en septiembre es la ciudad más maravillosa del mundo. Y con las mejores playas del mundo. Me río yo de Copacabana.