Mola ante los Brownlee en un carrera "de supervivencia"
El mallorquín Mario Mola, líder del Mundial, coge la responsabilidad en ausencia de Noya. Y Fernando Alarza aparece tapado.


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“Va a ser una carrera de supervivencia”. Así anuncia Mario Mola, líder de las Series Mundiales y ganador de cuatro pruebas este año, el triatlón que se celebra este jueves en Copacabana (11:00). En ausencia del quíntuple campeón mundial Javi Gómez Noya, que sufrió la rotura del radio hace un mes, cuando toda su preparación iba orientada a los Juegos, el mallorquín de 26 años toma el relevo. Y al acecho, Fernando Alarza (Talavera, 25 años), que es segundo en el Mundial y ganó la prueba de Ciudad del Cabo.
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Mola, un especialista en el 10.000 final donde suele bajar de treinta minutos, tiene claro que los hermanos Brownlee saldrán a reventar la carrera. “Será una bicicleta muy exigente porque hay un repecho con una pendiente importante que generará desgaste, y más en condiciones de calor y humedad. Sin duda, el 10.000 no va a ser tan estratosférico”, analiza.
Alistair Brownlee (28 años y oro en Londres) se ha dejado ver este año sólo por Estocolmo y Leeds, con dos victorias imponentes. Su hermano Jonathan (26 años), bronce en Londres, ha marcado dos segundos puestos. Y traen un gregario para trabajar para ellos. “Si conseguimos anular ese control tenemos posibilidades de echar abajo su estrategia. En fatiga son buenos corredores y van a endurecer mucho la carrera”, coincide Alarza.
El mallorquín y el talaverano han rematado sus entrenamientos en Galicia buscando condiciones climatológicas similares a Río. “La natación es a una sola vuelta y con olas pequeñas que añaden dificultad. Va a haber un gran desgastes y luego el repecho viene en el primer kilómetro (lo pasarán ocho veces), pero hemos entrenado todo eso con series de fatiga”, avanza.
En España no está previsto unir fuerzas, aunque Vicente Hernández, que entró por Mola, sería una baza para ayudarles. “Nos ha ido muy bien luchando solos en Mundial, pero si alguno no se encuentra bien y puede ayudar a otro, mucho mejor que gane un compañero una medalla”, desliza Mola, que sabe que este año, con todos jugando al gato y al ratón, puede haber sorpresas. En la agonía del mar, las cuestas y el paseo de Copacabana se coronará al hombre de hierro de Río.