La incertidumbre rodea el cierre del mercado de traspasos
Cuando restan unas horas para la hora límite que es clave para reforzar los equipos para octubre, muchas incóginitas quedan por despejar.
Cuando apenas restan unas horas para que se cierre la ventana del mercado de traspasos veraniego, es decir, a las diez de la noche hora peninsular, numerosos equipos quieren echar el resto o se debaten por hacerlo cuando las opciones son numerosas y variadas para todos aquellos conjuntos que tienen serias aspiraciones de poder hacerse un hueco y progresar profundamente a lo largo del mes de octubre.
Los encuentros que se han disputado a lo largo del fin de semana nos ha deparado el escenario que muchos anticipábamos y que, sin embargo, otros se negaban a ver. Hablo ni más ni menos que la certeza de que los New York Yankees no iban a ser un equipo de playoffs y eso ha permitido ‘desatascar’ una situación que se veía como insostenible. Sé que la situación es dura para los numerosos aficionados de los New York Yankees, acostumbrados recientemente a que su equipo compita y gaste sin cuartel durante la agencia libre. Al final, tantos contratos sobredimensionados te terminan pasando factura y es lo que están pagando ahora mismo. Pero tranquilos, todos los equipos pasan por momentos puntuales de reconstrucción y ahora les toca a los bombarderos del Bronx.
Traspasados los dos relevistas que más apetecían en este apasionante mercado, Aroldis Chapman a los Chicago Cubs y Andrew Miller a los Cleveland Indians, hemos comprobado un dato que no es baladí: el precio por los jugadores que pueden marcar diferencias está desatado y no está claro que vaya a bajar, incluso con lo poco que resta para el final de este proceso.
En circunstancias normales, los jugadores que pueden cambiar de aires, ya sea por su inminente agencia libre o porque se marchan a un club que tienen sólidas aspiraciones de levantar el trofeo del comisionado, suelen mostrarse receptivos a dar el paso, ya sea por ciertas prebendas que se puedan conseguir o por ganar el ansiado anillo. Por eso resulta sorprendente que Jonathan Lucroy no aceptara marcharse a Cleveland, que le necesitaba como agua de mayo, pero que formaba parte del grupo de equipos a los que podía vetar la operación, cosa que ocurrió. A cambio de dar luz verde al traspaso, Lucroy pedía alcanzar la agencia libre en apenas unos meses y/o ser el titular indiscutible para 2017, con un salario no acorde a sus cualidades, pero que estaba firmado.
Los Indians tuvieron claro qué había que hacer y se lanzaron a tumba abierta a por Andrew Miller, que se encargará de reforzar un bullpen ya sensacional de cara a octubre y recortar los partidos tras la actuación de la formidable rotación de los de Ohio.
Con todo esto, nos quedan una serie de preguntas que tendrán respuesta o no en el escaso período de tiempo que nos separa del cierre y que me dispongo a enumerar.
1.¿Habrá algún equipo que pague el rescate digno de un rey por Chris Sale?
Las últimas noticias que nos llegan desde Estados Unidos es que los White Sox no se apean de la burra y que siguen pidiendo no gran parte sino las piezas codiciadas de la organización que esté interesada en hacerse con sus servicios. Si por Chapman y Miller se ha dado lo que se ha dado, el precio por Sale debería ser mayor, ¿verdad? También se comenta que los Red Sox se están mostrando los más activos en este proceso, pero que tampoco el final se encuentra cerca. Con cada minuto que pasa, tenemos una certeza mayor sobre que Sale seguirá en la organización de los White Sox el 1 de agosto… a no ser que se produzca tal giro en los acontecimientos que nos pille a todos con el paso cambiado. Resulta más viable ver a algún titular de los Rays con una nueva camiseta que a Sale y no hace falta que tengamos que recurrir a sus habilidades con la tijera.
2. ¿Los Milwaukee Brewers traspasarán a Jonathan Lucroy?
Después del fiasco que ha rodeado su ‘no-traspaso’ a los Indians, los Brewers se encuentran en conversaciones con otro de sus equipos a los que les vendría bien un refuerzo de esta clase. Las informaciones apuntan a que la operación se basa en torno a Joey Gallo, que no sabemos si es Chris Davis 2.0 o Russell Branyan 2.0. La pegada es incuestionable, pero el jurado todavía está deliberando sobre su futuro. No parece que los New York Mets vayan a ‘seducir’ con su oferta a los Brewers.
3. ¿Jay Bruce estará en otro lugar que no sea Cincinnati el 2 de agosto?
Si bien los Cincinnati Reds no obtuvieron los jugadores por Chapman que deberían haber obtenido, su paciencia con Jay Bruce les puede dar grandes réditos. Su cotización nunca ha sido más alta y tanto por condiciones como por obligaciones salariales le convierten en un activo ideal para cualquier turno de bateo. Pues va a ser que sí. A falta de confirmación oficial, los New York Mets hacen una seria apuesta por él, traspasando a Brandon Nimmo y un par de promesas de menos nivel por Bruce. La idea sería que Céspedes y Bruce jueguen en las esquinas y el tándem Conforto/Granderson en el centro. Además, si el cubano decide ejecutar su cláusula de escape, Bruce seguiría con los de Queens en 2017.
4. ¿Cuál será el destino de Carlos Beltrán?
Tras la marcha de Aroldis Chapman y Andrew Miller, los Yankees pueden realizar una buena operación con Beltrán, que acaba contrato en unos meses. Y no, Iván Nova y Nathan Eovaldi no van a dar mucho a cambio y queda por ver la situación que rodea a Brian McCann. El boricua ha sido fuente de poderío para los del Bronx y se aspiraría a que hiciera lo mismo con su nuevo equipo, más con su incuestionable pedigrí en octubre, donde se ha manejado como pez en el agua.
5. ¿Qué equipos necesitan refuerzos para su bullpen?
Iba a decir que absolutamente todos, pero eso no es cierto. Si algo nos ha demostrado octubre es que tener un cuerpo de relevistas dominantes incrementa tus opciones para llegar a las Series Mundiales y ganarlas. Esa lección ha sido asimilada por todas las franquicias y las adquisiciones de mayor relumbrón han ido encaminadas en ese sentido. Mark Melancon ha llegado a los Nationals para solventar los problemas al final de los partidos y junto a Miller y Chapman, no serán los últimos movimientos.