Jama Aden y Balla, en libertad; guardaban jeringuillas con EPO
El juez ha dejado en libertad a Jama Aden y Musaeb Balla por la supuesta trama de dopaje desmantelada en Sabadell pero les retira el pasaporte.
El juez que investiga la supuesta trama de dopaje en las concentraciones de deportistas internacionales en Sabadell (Barcelona) ha dejado en libertad a los tres detenidos, entre ellos el entrenador Jama Aden y el atleta Musaeb Balla, aunque les ha retirado el pasaporte y les prohíbe salir de España.
Según han informado hoy los Mossos d'Esquadra en un comunicado, el juez también ha acordado que los tres detenidos, entre los que también figura un fisioterapeuta de confianza de Jama Aden, comparezcan una vez al mes en el juzgado.
Los Mossos d'Esquadra detuvieron el pasado lunes, 20 de junio, en Sabadell al entrenador somalí Jama Aden, acusado de suministrar sustancias dopantes a algunos de los atletas con los que estaba concentrado en la localidad, así como a su fisioterapeuta de confianza y al atleta catarí de origen sudanés Musaeb Addulrahaman Balla, especialista en los 800 metros libres.
Según ha detallado hoy la policía catalana, en los registros en seis de las habitaciones del Hotel Arrahaona, en el que se alojaba el entrenador y sus atletas, se localizaron 62 jeringuillas utilizadas, 23 precargadas de EPO y seis viales de distintos tipo de EPO, como Eprex, Aranesp, Naorecormon y Eporin.
Además, también localizaron 320 botellas y viales de medicamentos inyectables no dopantes, pero sí ilegales en España, así como documentación, ordenadores y teléfonos móviles.
Según los Mossos, los investigadores detectaron el pasado 31 de mayo que Jama Aden salía del hotel y arrojaba en un contenedor y en varias papeleras varias partes de una jeringuilla utilizada y manchada de sangre, así como una botella vacía de un medicamento endovenoso que, aunque no es dopante, es ilegal en España.
Aden, entrenador entre otros de la campeona mundial de 1.500 metros, la etíope Genzebe Dibaba, incurrió en la misma práctica los dos días siguientes, aunque cambiando la ruta, lo que, según los Mossos, evidencia una clara voluntad de ocultación.