NewslettersRegístrateAPP
españaESPAÑAchileCHILEcolombiaCOLOMBIAusaUSAméxicoMÉXICOusa latinoUSA LATINOaméricaAMÉRICA

El "idilio" entre Texas y Toronto

Las viejas rencillas suelen explotar en las manos

El derechazo de Rougned Odor a José Bautista es el epílogo de un incidente de octubre pasado, así como el Nolan Ryan-Robin Ventura tenía historia en 1993.

México DF
Las viejas rencillas suelen explotar en las manos
AFP

Es probable que Bautista y Odor vuelvan a verse en un diamante y a diferencia de otros peloteros, quizá sus actitudes no les permitan hacer las paces. ¿Serán capaces José Bautista y Rougned Odor de darse la mano dentro de 20 años, como si nada hubiera pasado el 15 de mayo de 2016?

En un instante, la pelea Bautista-Odor ganó su lugar entre las más populares –o infames, según el punto de vista— en la historia de las Grandes Ligas y evoca al que, quizá, es el choque entre dos peloteros más memorable.

Mientras el puñetazo que Odor le conectó a Bautista es digno de una buena pelea de box en Las Vegas, lo que Nolan Ryan le hizo a Robin Ventura en 1993 tuvo las características de un combate de la UFC.

Hay varias similitudes entre lo sucedido el pasado domingo en Arlington y la escena que Ventura y Ryan protagonizaron en 1993. De entrada, el caos volvió a desatarse en la misma ciudad y los Rangers de Texas fueron protagonistas también. En ambos casos, la gasolina fue derramada desde varios juegos antes de que los golpes crearan la chispa que encendió los ánimos en el diamante. El bat flip de Bautista en los Playoffs de la campaña pasada, divertido para unos y ofensivo para otros tantos, fue algo que los Rangers simplemente no pudieron superar.

En 1993, los Medias Blancas de Chicago, el equipo de Ventura, y los Rangers, el de Ryan, tenían varios juegos intercambiando pelotazos, pero el 4 de agosto de ese año, Ventura había visto suficiente y advirtió a sus compañeros que si le daban un pelotazo, se iría encima del pitcher.

Ventura empujó la primera carrera de ese partido, por lo que se convirtió en un objetivo natural para Ryan, quien al volver a verlo en la caja de bateo, le lanzó la pelota al hombro. Ventura se volteó y recibió el pelotazo justo detrás del brazo derecho. Dio unos pasos hacia primera base, cambió de dirección hacia la loma y se le fue a Ryan, quien lo abrazó del cuello con el brazo izquierdo y lo mantuvo en su cintura para lanzarse repetidos golpes en la cabeza.

La imagen es histórica porque involucró a una leyenda viviente, Ryan, quien tenía 46 años y jugaba su campaña 20 en las Mayores y que Ventura se le haya ido encima resultó sencillamente sorprendente para todos.

Es claro que Bautista no tiene la estatura que hace casi 23 años tenía Ryan ni Odor pesa en su club como Ventura lo hacía en su equipo, pero ambos pasaron a la historia por la imagen en la que el venezolano de los Rangers tira la gorra y los lentes oscuros del dominicano de Azulejos al conectarle con el puño en la quijada.

Aunque hasta 19 años después de aquella infame escena, Ventura y Ryan pudieron hablar sin problemas, ya con roles distintos: Ventura era manager de Medias Blancas y Ryan presidente de los Rangers.

¿Serán capaces Bautista y Odor de superar el también infame incidente que provocó el toletero dominicano en octubre pasado? Aquí entra en juego la actitud latina de ambos peloteros y el hecho de que ninguno está en el ocaso de sus carreras, por lo que la posibilidad de que vuelvan a encontrarse en un diamante es latente.

Para muchos, Ventura se pasó de la raya al intentar golpear a Ryan, para otros, se ganó el respeto al dejar claro que no se intimidaría por nadie, ni siquiera por uno de los mejores pitchers de la época moderna. A Odor le han criticado la decisión de golpear a Bautista, a quien varios señalan como un pelotero provocador y de actitudes ofensivas hacia el rival.

Sólo el tiempo dirá qué imagen se tatúa en el legado de ambos peloteros latinos y si serán capaces de superar este episodio y estrechar sus manos como Ventura y Ryan lo hicieron.