El cielo es el límite para Jake Arrieta y los Chicago Cubs

Nadie nos auguraba lo que podía pasar en la jornada del jueves, más allá de las taquicardias de los primeros duelos del día, con la debacle de los Red Sox y el partido de ida y vuelta entre Mariners e Indians. Sin duda alguna, nada anticipaba que pocas horas más tarde veríamos a Jake Arrieta volver a hacer historia, pero ya abordaremos su figura un poco más adelante.

Cleveland Indians-Seattle Mariners (7-10 en 10 entradas)

Buen aperitivo para iniciar el jueves. Después de adelantarse con un 5-0 frente a los locales, los Mariners asistieron con pavor como los Indians reaccionaban y empataban el partido por partida doble. Uno pudiera pensar que la ventaja moral la tenían los de Cleveland y más cuando su closer Chad Allen se medía a Robinson Canó, al que había dominado hasta la fecha. Un home run de tres carreras más tarde y la certeza de que la mejor versión de Canó ha llegado para quedarse.

Atlanta Braves-Los Ángeles Dodgers (1-2 en 10 entradas)

Un partido más que llegaba a entradas extra. Clayton Kershaw fue capaz de sobrevivir a los Braves, a los que anuló por completo a lo largo de ocho entradas a pesar de haber igualado la cifra más alta de hits de su carrera, con lanzamiento ‘bombeado’ de 48 millas por hora a Tyler Flowers. Yasmani Grandal logró impulsar la carrera de la victoria en el tiempo añadido.

Miami Marlins-Washington Nationals (5-1)

Un día más, un home run de Bruce Harper, pero esta vez no sirvió para dar el triunfo a los Nationals, que siguen comandando su división. En este momento, fue el venerable Ichiro Suzuki quien destapó el tarro de las esencias y logró dos hits y dos carreras anotadas, incluido el número 2942 de su trayectoria en las Grandes Ligas. Ni el tándem Harper-Scherzer fue suficiente para darle opciones a los capitalinos que se vieron sobrepasados.

Boston Red Sox-Tampa Bay Rays (8-12)

Horroroso partido de los locales, que no fueron capaces de frenar el ímpetu del peor ataque de la Liga Americana, que estableció la mejor marca de hits y carreras de la campaña. Desangelada actuación de los pitchers de los Red Sox, comenzando por David Price, que fue incapaz de aguantar un 5-1 tras la primera entrada. No obstante, a pesar de las imprecisiones, Boston le puso emoción al tramo final, pero sin concretar la enésima reacción. Se empieza a calentar el asiento de John Farrell.

Milwaukee Brewers-Minnesota Twins (1-8)

Las canciones de Prince que sonaron por los altavoces del Miller Park inspiraron a los Twins a la hora de conseguir su primer triunfo del año. Brian Dozier y Miguel Sanó, que está flexionando los músculos como se esperaba, lograron home run y hasta Ricky Nolasco parecía un pitcher competente, anulando a los Brewers a lo largo de más de seis entradas.

Chicago White Sox-Los Ángeles Angels (2-3)

Según avanza la campaña, Mike Trout empieza a calentarse más y más. Su segundo home run del año formó parte del despliegue a nivel global de los últimos dos choques y fue más que suficiente para que un efectivo Jered Weaver fuera capaz de dominar a los White Sox a lo largo de siete entradas, no superando las 86 millas por hora.

San Francisco Giants-Arizona Diamondbacks (2-6)

Soberbio el comportamiento de los D´Backs en su visita a la bahía, pillando a los Giants en el momento apropiado y barriéndoles en su propio campo a lo largo de cuatro encuentros. Yasmani Tomás fue capaz de conectar con potencia, que sigue siendo una de sus carencias, y le dieron a Johnny Cueto su primera derrota del año. De esta manera, y a pesar del flojo rendimiento de sus dos primeras espadas en la rotación, los de Arizona ya están con récord positivo.

Baltimore Orioles-Toronto Blue Jays (3-2)

Para ser un equipo que lidera las Grandes Ligas en home runs y que vive de ellos, ser capaz de ganar encuentros consecutivos contra los poderosos Blue Jays sin lograr ni uno, tiene mucho mérito. Manny Machado sigue lanzado en su carrera particular por el MVP y fue el hombre que impulsó la carrera decisiva en la octava entrada contra un Brett Cecil que no atraviesa sus mejores momentos en el bullpen canadiense.

New York Yankees-Oakland Athletics (3-7)

Los Athletics tienen tomada la medida a los Yankees en el Bronx, y son el único equipo imbatido como visitante. Home runs consecutivos de Coco Crisp y Khris Davis fueron clave en la enésima reacción de los de Oakland contra los lanzadores neoyorquinos, que no son los únicos culpables de la preocupante espiral del inicio de temporada. El ataque no está produciendo nada, pero esto cambiará o más les vale.

Cincinnati Reds-Chicago Cubs (0-16)

El partido del día. En realidad, acabó tras la segunda entrada cuando los Cubs se pusieron 4-0 y con Jake Arrieta. Lo que nadie anticipaba fue que el propio Jake Arrieta se convertiría en la historia. Aunque no estuvo tan soberbio como en su anterior no-hitter, el diestro de los Cubs aplastó a los Reds a lo largo de las nueve entradas y conseguía el no-hitter número 15 de la franquicia. Especialmente emotivo fue para el veterano catcher David Ross, que se retirará al final de la temporada y que conseguía estar al otro lado del plate en un momento histórico como éste. Agárrate, Clayton Kershaw, que aquí viene Jake Arrieta.

Kansas City Royals-Detroit Tigers (4-0)

Edison Volquez demuestra que las buenas sensaciones del inicio del año tienen motivos de peso y fue capaz de anular en siete entradas al poderoso ataque de Detroit. Menos esperanzadora es la actuación de Mike Pelfrey, la otra gran contratación para la rotación en la agencia libre, que no termina de dar con la tecla. Soberbio Alex Gordon con una captura para enmarcar.

Texas Rangers-Houston Astros (7-4)

Se ha hecho de rogar, pero el primer home run del año a cargo de Ian Desmond llegó al fin para marcar diferencias en la nueva salida efectiva de A.J. Griffin. Todo ello y más era necesario si querían derrotar al ganador del Cy Young del año pasado, Dallas Keuchel, que fue vapuleado sin compasión por parte de sus rivales estatales y que continúan con su excelente inicio de temporada.

San Diego Padres-Pittsburgh Pirates (1-11)

El californiano Gerrit Cole tuvo que parar en seco la espiral derrotista de los Pirates, que habían caído en seis de los últimos ocho partidos, y el alumno de UCLA estuvo magnífico a la hora de completar sus seis entradas, evitando el barrido en la visita al Petco Park. Importante victoria para afrontar la visita a Arizona con más optimismo.