Will Smith asesinado a tiros por una pelea de tráfico

Will Smith, ex jugador de los New Orleans Saints de la NFL, fue asesinado ayer en la ciudad de Nueva Orleans. Cardell Hayes, un individuo de 30 años, fue detenido por ser el culpable de haberle disparado y quitado la vida.

La antigua estrella de los Saints había salido a cenar con su mujer. En un momento de la noche tuvo un incidente automovilístico. Su Mercedes fue golpeado por un Hummer. Él iba conduciendo y su mujer en el asiento del copiloto. Comenzó, entonces, un intercambio de palabras que desembocó en Hayes, el conductor del Hammer, sacando su pistola y disparando tanto a Smith como a su señora. El primero falleció allí mismo mientras que a la segunda pudieron llevarla al hospital, con heridas en las piernas, para ser atendida. El asesino fue detenido por la policia.

El matrimonio Smith tenía tres hijos

En cuanto se comenzó a conocer el alcance de la noticia se produjeron las reacciones. El primero en llegar a la escena del crimen fue Pierre Thomas, compañero de Smith en los Saints, que había estado con la pareja compartiendo parte de la noche. Desde Tom Benson, dueño de la franquicia de New Orleans de la NFL, hasta el último de sus compañeros y rivales se han hecho cruces por lo sucedido. En todos los casos ha aflorado la categoría humana de Will Smith así como el indescriptible sinsentido que ha acabado con su vida.

Will Smith será llorado. Cuentan que en el vestuario de los Saints de Sean Payton, su entrenador, era una voz autorizada. Fue uno de los grandes líderes, al menos vocales, tanto del anillo que consiguieron en la temporada 2009 como en los años posteriores, donde sufrieron el escándalo 'bountygate'.

Fue una primera ronda del draft de la NFL en el año 2004. Jugó como defensive end y acumuló 67,5 sacks a lo largo de su carrera, con la nada despreciable cifra de 13 en 2009, sin duda la cima de su periplo deportivo, así como también la del equipo.