La desesperación de los Broncos: también les vale Tyrod Taylor

A los Denver Broncos les ha hecho un destrozo importante Brock Osweiler. Pueden tratar de disimularlo de la forma que quieran, pero le ofrecieron lo máximo que le podían ofrecer teniendo en cuenta sus restricciones en materia de espacio salarial, 14 millones, y el jugador les dejó plantados por dos millones al año más, y vaya usted a saber cuanto asegurado, en su nuevo y flamante contrato con los Houston Texans.

Eso no estaba en los planes de John Elway, presidente de los Broncos, algo que está quedando demostrado con los movimientos que se han hecho después en la franquicia y que huelen a desesperación hasta desde Cangas del Narcea, Asturias. Cual tipo plantado en el altar, los Broncos llevan un tiempo emborrachandose en garitos de mala muerte y tirándole los trastos a cualquiera que se mueva en la pista de baile. Y, como en esa situación, se está yendo a casa sólo cada noche.

Porque no existe plan alguno, ahora mismo, que no sea conseguir un QB. El que sea. No importa su bagaje, su historial, su estilo ni su talento. Eso sí: siempre intentando pagar menos de lo que marca el mercado. Y lo que se deduce de tal situación es que no se esperaban ver en la misma.

Primero, que se sepa, hablaron con Robert Griffin III. Sólo que, a la vez, entablaron conversaciones con los San Francisco 49ers por Colin Kaepernick. En una suerte de diálogo a tres bandas, se enfangaron en sus propias dudas y el primero se les escapó y firmó con Cleveland.

Estando así las cosas, intensificaron su persecución de Kaep. Llegaron a un acuerdo con San Francisco, al parecer una tercera o cuarta ronda, pero le pidieron al QB que se rebajara su salario, que pasase de cobrar 12 garantizados este año a 7, con un contrato de cinco años siendo los tres últimos, como es norma, opciones absolutas del equipo sin que el jugador pudiera decir nada. A tal punto se llegó que el propio Elway se sentó, en persona, dos veces con Kaep para convencerle, algo que aún no ha conseguido.

Por si acaso, ya antes habían hablado con Johnny Manziel, y habían fichado a Mark Sánchez por una séptima ronda (condicional) como red de seguridad. Que llamaron a Tampa Bay preguntando por Mike Glennon es otra filtración que podemos creer, verosímil, así como que colgaron ipso facto cuando los Bucs les pidieron su primera ronda.

Ahora hacen lo propio con los Bills y Tyrod Taylor. El jugador ha sido nombrado titular en Buffalo, pero se han negado a renovarle este año y hacerle un gran contrato hasta ques e vea que puede hacer en su segundo año a los mandos del equipo, así que no es descartable que miren de traspasarle. Claro que, como Tampa, a Denver se le pedirá la primera ronda, y estos, como en todos los casos anteriores, ratearán.

Es lo que tiene la desesperación, el hambre: que te vale todo. Lo mismo gente que lideré la option, que tipos más duchos en estar en el pocket, jugadores de vuelta de todo o promesas. Da igual. El plan ha saltado por los aires y lo único que quieren es tapar el agujero. Y, encima, sin pagar lo que cada cual les pide. En algún momento cederán, sí, es lo que tiene el estar desesperado.