PREVIAS MLB 2016: SAN DIEGO PADRES
San Diego Padres: El sentido común vuelve a California
Después de acaparar grandes titulares en el 2015 y ser una de las decepciones, los Padres protagonizan un profundo lavado de cara en 2016.
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En la Major League Baseball es interesante poder diferenciar entre los ganadores de la gran época de fichajes, traspasos y los equipos que realmente presentan sus referencias de cara a poder triunfar durante la campaña regular antes de brillar con enorme intensidad en octubre. Ese fue el resumen de la campaña de los San Diego Padres, que acapararon las portadas de prensa con todas esas adquisiciones, pero que ensombrecieron las dudas que planteaba esta franquicia cuando recapacitabas acerca de los puntos fuertes y, especialmente los débiles.
Es muy cierto que, cuando se hablan de adquisiciones como Craig Kimbrel, Justin Upton, James Shields o Wil Myers, el panorama para la sufrida parroquia de los Padres es más esperanzadora. Luego llega la cruda realidad y el varapalo no es duro sino lo siguiente. Si encima uno recapacita en lo que se dejó el club en términos de talentos de las Ligas Menores, el panorama es para echarse a llorar.
Avanzamos un año en el calendario de la competición y el escenario es bien distinto. La (relativa) locura transitoria de A.J. Preller, el general manager que quiso adelantar los plazos y convertir en un aspirante a los playoffs de forma inmediata, tocó a su fin y nos ha dejado a un Preller que ha hecho un gran trabajo de reflexión para que la cordura volviera a hacer acto de presencia en la soleada San Diego. El experimento de 2015 nos dejó una franquicia que se hizo con 74 victorias y, lo más curioso de todo, las más altas esferas del club confían en que ese número puede ser superado en la temporada venidera.
¿Eso es posible? ¿Puede lograr eso un equipo que está intentando recuperar el fondo de armario que se fundió el año pasado? Es el truco del más difícil todavía por parte del GM, que demostró ser capaz de jugarse el todo por el todo a una mano (y salir escaldado) y ahora tiene que reconstruir y superarse a si mismo.
Lo cierto es que hay puntos positivos que pueden llevarnos a pensar precisamente eso. Kemp fue el Kemp de antaño (al menos en ataque) durante la segunda mitad. Wil Myers todavía es joven y nos olvidamos que fue el mejor novato de la Liga Americana en 2013. Cashner y Ross tienen capacidad para ser lanzadores que marquen diferencias y que complementen al veterano James Shields. El prometedor Manuel Margot puede convertirse en la gran estrella del club en un breve período de tiempo.
Muchos condicionales y posibilidades que pueden llevarnos a un sueño prometedor... o a despertarnos en de la cruda realidad.
El detalle histórico
¿Sabéis que los Padres son uno de los dos equipos originales de California? Dodgers, Giants y Athletics vienen de la costa Este, así que sólo Angels y los de San Diego son originarios del estado. Se fundaron en 1969 y en la mayor parte de su historia han sido un equipo perdedor pues sólo tienen 14 temporadas en su curriculum con más victorias que derrotas. No tienen ningún título de las World Series pero participaron en dos, las de los años 1984 y 1998. El último título de división data del año 2006.
Las tres claves del equipo
1. Matt Kemp, Will Myers y Melvin Upton tienen talento. A veces es difícil discernirlo, y más tras la catástrofe que fueron estos señores en la campaña 2015, pero nunca hay que descartar que fuese debida a la dinámica de grupo y a una inercia perniciosa.
2. James Shields y Andrew Cashmer tienen talento. Pero Shields también tiene años y un montón de lanzamientos en su brazo, por lo que no se puede esperar de él que rinda como lo que una vez fue pero, caramba, en este grupo de pitchers hay más de lo que hicieron en 2015.
3. El ataque es mejor de lo que parece. En general, los Padres anotaron más carreras de las que la percepción general indica. El proyecto del 2015 fue un enorme fracaso, pero no tanto como podría suponerse.
Lo mejor
1. No pueden ser peores que el año pasado, cuando todo el mundo rindió mal.
2. No existe ninguna expectativa sobre el equipo pues nadie espera nada de ellos.
3. Tienen talento en la granero de promesas y buenas elecciones en el draft.
Lo peor
1. La misma plantilla que les llevó al fracaso es, si cabe, un poco peor.
2. La edad de James Shields no anima a pensar que se recuperará de un mal 2015.
3. Triste tener que empezar la temporada pensando en el talento del futuro.